El Ayuntamiento se ha puesto en pie de guerra para reducir las emisiones contaminantes y hacer cumplir el pacto por el clima. La concejal delegada de Medio Ambiente, Amparo Pernichi, presentó ayer una batería de medidas que se van a poner en marcha desde su Delegación para poner freno a este problema y entre las que destaca el fomento del impulso de la bicicleta entre los propios funcionarios municipales. Pernichi explicó que se va a poner "bicicletas a disposición de los servicios municipales para que los funcionarios se muevan en bici en su labor y den ejemplo". Así, "vamos a pasar una ficha a los servicios municipales para que soliciten la cantidad de bicis que necesitarían para gestionar sus servicios", explicó la edil.

El uso de la bicicleta será una de las principales apuesta del gobierno municipal, que va a exigir incluso a la Junta de Andalucía que materialice su compromiso con el Plan Andaluz de la Bicicleta. El Ayuntamiento, además, tiene previsto otras medidas como la instalación de jaulas que actúen a modo de garaje de manera que el usuario pueda abrir el dispositivo mediante un código y dejar allí su vehículo, según explicó Pernichi.

La edil explicó que no sólo han planteado medidas para la reducción de emisiones, sino que la estrategia de trabajo pasa también por crear nuevos "sumideros" capaces de neutralizar el dióxido de carbono que se traslada a la atmósfera, es decir, más zonas verdes. En este sentido Pernichi explicó que están en conversaciones con la Junta de Andalucía para intentar que los senderos que salen del casco urbano a las barriadas periféricas se conviertan en paseos con árboles para que "sirvan como espacios de ocio y sumideros de carbono". Además, todas las obras de Infraestructuras contarán con zonas verdes "siempre que haya espacio", mientras que el Ayuntamiento está trabajando ya en la ordenanza del árbol. Medio Ambiente quiere también "crear dos grandes espacios en la ciudad" de huertos urbanos, en el Parque de Levante y el Cordel de Écija, que se sumarían a la Asomadilla.

Pernichi explicó que el 69% de las emisiones contaminantes proceden del uso privado del coche, mientras que el consumo eléctrico también debe reducirse.