Juan Carlos Bernal es panadero de profesión y acumuló una amplia experiencia laboral en su sector antes de lanzarse a emprender con su propio negocio. Un ajuste de plantilla en la empresa para la que trabajaba fue el detonante para abrir una vía laboral y personal nueva, junto a su mujer, Victoria Mellado. Ambos decidieron entonces dar forma a la Cafetería Obrador Victoria y, hace ahora cinco meses, iniciaron una andadura que ya da sus primeros réditos.

"Nuestra idea inicial era abrir una panadería, en este local pequeñito del que disponíamos, pero una vez que lo planteamos le dimos un giro a la idea inicial y decidimos montar una cafetería, abarcar algo más que la simple venta de pan", cuenta Juan Carlos, que se muestra además "muy contento por cómo están respondiendo los vecinos y por la acogida que tiene nuestro negocio en tan poco tiempo".

En la Cafetería Obrador Victoria destaca el producto artesano, tanto en el pan como en los dulces, para los que este matrimonio cordobés ha confiado en el pastelero Manuel Durán, que sirve a muchos establecimientos similares por toda la ciudad. En cuanto al pan, Juan Carlos es el encargado de elaborarlo, "de manera artesana", como él mismo asegura y con una máxima muy clara: "Nos hemos ajustado al máximo en cuanto al precio, por eso la relación calidad-precio por el producto que ofrecemos es muy buena". Sobre todo por la garantía de calidad que supone la elaboración día a día del pan, con ingredientes naturales y de confianza. "Los clientes eso lo notan y la gente está muy contenta con el sabor del pan, sobre todo de nuestras teleras, que es el pan tradicional de Córdoba y muchos clientes nos dicen que hace muchos años que no comían una telera con este sabor, con esa miga", apunta Juan Carlos.

Esa competitividad en los precios se nota también a la hora de los desayunos. Y es que Juan Carlos y su mujer se han hecho rápidamente un hueco en esa franja horaria del día gracias a la variedad que ofrecen a sus clientes, a un precio muy accesible. Además de elegir entre las 16 piezas de pan distintas que elaboran a diario, los clientes de la Cafetería Obrador Victoria puede desayunar con una amplia oferta de patés, cremas ibéricas, mantequillas, mermeladas, jamón y todo tipo de embutidos. Y eso a un precio que oscila entre el 1,80 y el 2,10 en los desayunos clásicos.

Y por las tardes, la cafetería de Juan Carlos Bernal y Victoria Mellado es un lugar muy apetecible para merendar, con su oferta de zumos, batidos, tés, cafés y el sabor de sus dulces, o incluso para tomar una cerveza o un refresco.

La Cafetería Obrador Victoria abre de lunes a sábado a partir de las 7:30 para ofrecer a sus clientes el pan recién elaborado y sus sabrosos desayunos y permanece abierta hasta las 14:30. Por las tardes, de lunes a viernes se puede disfrutar de sus meriendas desde las 16:30 hasta las 20:30. Pero el trabajo de elaboración para Juan Carlos Bernal empieza mucho antes de la apertura, de madrugada, cuando se prepara y se cuece el pan al estilo tradicional. Un sacrificio importante el que conlleva este oficio, con la intención de ofrecer al cliente un producto hecho a diario y sin precocinar ni congelar.

Esa diferencia la aprecian los clientes y es algo que compensa la dedicación necesaria. "Sin duda para nosotros, abrir el negocio ha sido también llenarnos de ilusión porque la gente ha respondido. Lo que se te hace tan duro a la misma vez es gratificante porque ves que a la gente le gusta", asegura Bernal.