El medio millar de agentes de la Policía Local de Córdoba iniciará hoy hasta el próximo 23 de junio un periodo de seis días de huelga de brazos caídos en los que la actividad de los servicios se limitará a garantizar la seguridad ciudadana y a responder a las demandas de los administrados que reclamen la presencia de los funcionarios de la autoridad municipal, explicó ayer el secretario del Sipl-B, sindicato mayoritario del cuerpo local, Francisco Blanque. Los responsables sindicales se suman de este modo a una iniciativa andaluza que quiere protestar contra la decisión del Gobierno y de los ayuntamientos de recortar las nóminas de los trabajadores públicos en un 5% de media para combatir el déficit público.

La huelga será de brazos caídos pero los agentes de la autoridad seguirán en sus puestos de trabajo ya que no tienen reconocido el derecho del resto de trabajadores de no asistir a su jornada laboral en casos de conflicto con quien les paga las nóminas. Blanque reconoció ayer que se trata de una protesta peculiar y que tiene que ser realizada salvaguardando los intereses de la ciudadanía, sobre todo teniendo en cuenta los problemas legales que puede suscitarse si no se sanciona una infracción flagrante en la que un agente sea testigo directo o que proceda de la demanda de un ciudadano.

Las circulares enviadas desde los sindicatos andaluces de policías establecen claramente las pautas a seguir en el caso concreto de secundar la protesta. "Lo mínimo", explica Blanque. En este caso, lo mejor es conocer el impacto que la medida ha tenido en otros puntos de Andalucía. En Sevilla, por ejemplo, en un fin de semana se suelen poner dos centenares de denuncias por distintos motivos. El último fin de semana, se registraron 30 actas de infracción, en un tijeretazo que están realizando también de manera encubierta policías nacionales y guardias civiles, según las asociaciones y sindicatos.

Las directrices de los sindicatos convocantes pasan por evitar poner denuncias en los que tenga que ver la labor del policía como agente activo. Según lo que ha ocurrido en otras capitales, si un ciudadano queda atrapado por una doble fila se responde a su llamada y se solventa la situación. La huelga afectaría, por ejemplo, a las rondas donde se multa a los automóviles mal estacionados pero que no supongan un problema para la seguridad. Además, se está instando a los agentes a que reeduquen a los ciudadanos infractores en vez de proceder directamente a expedirle el parte de denuncias.

La protesta de los funcionarios de la Policía Local se produce en un momento en el que se ha aprobado ya la adaptación municipal del decreto del Gobierno, que afecta tanto a salario base, a los trienios y a los complementos. En el caso de la Policía Local, la mayor parte de los agentes se encuentran encuadrados en el grupo C, que es el que menos recorte tendrá al ser el que menos retribución recibe. El Consistorio ha dispuesto un recorte lineal de los complementos del 5%. En el caso de los agentes municipales, el complemento específico es el que recoge las singularidades del puesto de trabajo como la nocturnidad o la peligrosidad.

Los sindicatos de empleados públicos tiene previsto llevar a cabo hoy una reunión de la plataforma única en la que estarán los representantes de las principales organizaciones. El próximo día 23, en la que finaliza la huelga policial de brazos caídos, se celebrará una concentración de funcionarios frente a la Subdelegación del Gobierno para protestar por el tijeretazo.