Cualquiera diría que el Córdoba se jugaba ayer algo más que tres puntos y gran parte de la confianza de su técnico en el duelo ante el Lugo. Porque viendo la actitud del equipo y su desempeño sobre el terreno de juego, más bien pareció que el conjunto blanquiverde apenas se jugaba la honra ante los lucenses.

Y eso que el CCF salió concentrado al terreno de juego y con ganas de tener el balón. Pero de nuevo el equipo pecó de falta de profundidad y tuvo un dominio del esférico bastante ineficaz. A ello contribuyó mucho la falta de un delantero nato que pudiera dar final a las jugadas, porque Juli demostró estar muy perdido en ese rol. Pero ya saben, según explicó Emilio Vega recientemente, el equipo no necesitaba más delanteros...

Apenas media hora duró la intensidad de un Córdoba que volvió a diluirse con el paso de los minutos y al que de nuevo golpeó la mala fortuna, con el tanto de Joselu, que rebota en Caro. Claro que lo que no es casualidad es que el Lugo rematara prácticamente todos los balones en jugadas de estrategia que tuvo.

Para colmo, los cambios de Carrión no ayudaron a la reacción del equipo y le hicieron perder más peso en el juego, para acabar de nuevo cayendo y sin oponer mucha resistencia.