El Guadalquivir Futuro no sabe dónde estará mañana. Ironías de la vida. El club más representativo del voleibol femenino en Córdoba se debate estos días entre los deseos de continuar con su proyecto y la cruda realidad de los hechos. Sin respaldos institucionales ni empresariales que le permitan sufragar los gastos de la competición -la Primera División Andaluza- para su primera plantilla, la entidad que dirige José Antonio González atraviesa horas cruciales. Lo peor del asunto es que sus reclamaciones de una reunión con los responsables del Instituto Municipal de Deportes (IMD) no han encontrado respuesta, según afirma el club en un comunicado hecho público en el que expone una situación insostenible. "Si en una semana no nos reunimos con el IMD, la desaparición del club será una realidad", declara el presidente, quien denuncia que en octubre se tendría que solucionar la cesión del Pabellón Guadalquivir, en el que radica el club, y cuyo convenio "ha sido revocado hasta nueva orden", según indica el mandatario.

El Guadalquivir Futuro ha ido creciendo en los dos últimos años en cuanto a logros deportivos y para el curso que se avecina ha reclutado a jugadoras relevantes del panorama local, entre las que figura Elena Domínguez. "Por fin hemos logrado reunir jugadoras importantes del voleibol cordobés y el equipo es plenamente de la ciudad", explica Rafa Vargas, vicepresidente del Guadalquivir y delegado en Córdoba de la Federación Andaluza de Voleibol (FAVB). Vargas, cuyo nombre está ligado a la edad de oro de este deporte en Córdoba, recalca que la ilusión que se ha recobrado no se puede defraudar. Si el club no sale, "difícilmente volveremos a tener voleibol de élite en Córdoba, a nivel absoluto, en muchos años". En los mismos términos se expresa el presidente, José Antonio González, que califica como "un verdadero desastre" la posibilidad de que "un club que está escribiendo páginas de oro" viera "cortado de raíz su crecimiento".

El Guadalquivir Futuro viene reclamando "desde el mes de junio una reunión con el nuevo presidente del IMD", según señala en el comunicado público, para estudiar una salida al convenio de cesión de espacios deportivos "que ha sido revocado hasta nueva orden desde la asesoría técnica del IMD". El club afirma que "necesita" el pabellón del Guadalquivir pues "es de obligado cumplimiendo en esa categoría -la Primera Andaluza- entrenar y jugar en pista cubierta". Actualmente, el club vive en la incertidumbre ya que "no tenemos decidido si federar o no al equipo por la precaria situación económica, y aún más de espacios, en la que estamos inmersos". El proyecto del Guadalquivir Futuro busca una mano tendida para seguir adelante.