Turismo

La exclusiva habitación con azotea privada para dormir bajo el cielo de Córdoba

Terraza de la Habitación Ruzbahan de Hotel Balcón de Córdoba

Terraza de la Habitación Ruzbahan de Hotel Balcón de Córdoba / Hotel Balcón de Córdoba

En plena Judería de Córdoba son numerosos los rincones y lugares preñados de magia y encanto, aunque, sin duda, el Hotel Balcón de Córdoba (Encarnación, 8) es difícil de igualar. No sólo por su ubicación, sino por su pasado, su diseño y sus instalaciones. 

Cuenta con 10 habitaciones, repartidas en dos plantas y que rodean tres patios en los que prima el frescor, el silencio y la tranquilidad. Un auténtico oasis de relax en pleno Centro Histórico de la ciudad. 

Tanto desde el torreón de la casa como desde sus balcones o terrazas, sus huéspedes podrán disfrutar de unas vistas únicas del entorno monumental que abraza al edificio. 

A esto se suma el hecho de que Balcón de Córdoba  alberga más de un centenar de cien restos arqueológicos repartidos a lo largo de todo el edificio: lápidas y columnas romanas e hispanomusulmanas y otras piedras talladas de gran valor artístico. 

Y entre todas sus habituaciones hay una que es realmente especial. Bautizada como Ruzbahan, alude a un antiguo nombre persa de varón, que se podría traducir como "el buen día, el día alegre".

Ruzbahan también es una suerte de casita de pueblo ubicada en la parte más alta del hotel. Bohemia y tremendamente romántica, desde la ventana ubicada frente a la cama se oye el canto de la fuente del Patio de las Flores. Y lo mejor de todo es que por su larga escalera de madera se alcanza la azotea privada, un espacio discreto y encantados entre tejados donde tomar el sol, disfrutar de una bebida o dormir a la luz de la luna o bajo un manto de estrellas. 

Interior de la habitación Ruzbahan Interior de la habitación Ruzbahan

Interior de la habitación Ruzbahan / Hotel Balcón de Córdoba

Tesoro gastronómico

El Hotel se levanta sobre un solar largamente centenario. Se trata de un edificio del siglo XVII, que ha experimentado sucesivas modificaciones. El resultado es un edificio de carácter ecléctico, que bebe de la  la  tradición clásica, la islámica y la castellana. Tampoco faltan influencias flamencas y europeas. 

Aunque, sin duda, la joya de la corona es su restaurante, Pairi Daeza, donde deleitarse con una gastronomía local reinterpretada y la terraza que tiene en la parte superior y desde la que se contempla la Mezquita-Catedral, literalmente, al alcance de la mano. 

Resulta una experiencia única ver un atardecer desde allí, tomar una copa o bien cenar en un ambiente de los más íntimo. Sin duda, es la terraza más romántica de Córdoba y una de las mejores localizaciones para sorprender con una petición de matrimonio 

El restaurante ofrece una panorámica privilegiada del monumento más famoso de la ciudad, mientras los comensales dan buena cuenta de la deliciosa y sofisticada cocina de Antonio Burrueco. Una copa de champagne o un cóctel son el remate final perfecto. 

Auténtica cocina que refleja la historia culinaria de Córdoba, fusión entre las culturas andaluza y mediterránea. En suma, platos tradicionales e innovadores con productos frescos de temporada. Igualmente, cuentan con una amplia selección de vinos, con el que poder apreciar las texturas y sabores de nuestra cocina.

Una fórmula única de guiar los sentidos del comensal para experimentar una nueva forma de disfrutar de un momento de relax y gastronomía, llena de historia y autenticidad. De hecho la expresión Pairi Daeza hace referencia a un jardín o una arboleda entre las paredes, exactamente como es el patio interior que alberga el resto de las mesas del restaurante. 

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