De Montalbán a Córdoba. Un total de 20 sabores, algunos tan golosos como el milhojas, las gachas, el carapino (nata con piñones), el mantecado o la crema catalana, componen la extensa carte de Ké Sabor, una nueva heladería ubicada en el número 9 de la calle Concepción, en pleno centro de la ciudad, con el surtido servido por el obrador de Heladería de Montalbán.

Como ha avanzado una de las socias, María del Mar Sánchez, el nuevo negocio abre sus puertas este Jueves Santo con un amplísimo surtido de la heladería decana de la campiña cordobesa, cuyos orígenes se remontan a 1955.

En aquel año, Julián Gálvez abrió una pequeña fábrica familiar de hielos y helados artesanos en la tierra del melón y el ajo, algo que parecía una locura. Décadas más tarde, en 1990, ya con la segunda generación, se acomete el proyecto de creación de una línea de alta pastelería artesana, cuyas creaciones también estarán disponibles en Ké Sabor.

"Desde el comienzo de Heladería de Montalbá,n la elaboración era puramente artesanal, lo que continúa siendo una marca de excelencia de esta empresa y una de las razones de su popularidad", subrayan desde la marca, que a partir de ahora también refrescará los días calurosos en la ciudad.

El yogur con frutas del bosque, el Kinder, el turrón, el pionono, la clásica straciatella o el tocino de cielo son otros clásicos de la marca montalbeña que se podrán catar en Ké Sabor. También habrá variedades sin gluten, sin lactosa y sin azúcar, aptas para personas con todo tipo de intolerancias.