El uso de las mascarillas, además de obligatorio en sitios públicos, está más que aceptado por la sociedad y casi nadie duda ya de los beneficios que aporta dicho artilugio.

Pero existen numerosos tipos de mascarillas y no todas poseen la misma eficacia. Unas de las más conocidas y con mejor fama hasta ahora son las llamadas 'mascarillas del CSIC'. Se llaman así porque han sido creadas gracias a la colaboración entre ese estamento y la empresa Bionicia, fundada por uno de sus trabajadores, José María Lagarón.

Son mascarillas del tipo FFP2, con nanofibras, que tienen un período de uso mayor que el habitual y están realizadas completamente en España.

Sin embargo, desde diferentes sectores han apuntado que, a pesar de que son unas mascarillas eficientes, pueden tener alguna laguna. Según los expertos, aunque la mascarilla evite el paso del virus, este se queda en la parte exterior de la mascarilla, por lo que al tener contacto con esa parte de la mascarilla, la infección puede ser posible de manera secundaria.

Por ello, el propio Lagarón ha comunicado que van a mejorar todavía más sus mascarillas y solucionar ese problema. A partir de ahora, según ha comunicado el propio Lagarón, van a incluir un compuesto que neutraliza y mata el virus.

La idea es que la mayor parte de las partículas pasarán la capa exterior, con huecos grandes, y se quedarán atrapadas en la capa intermedia, que es donde el agente viricida actuará para eliminar la carga. El creador de estas mascarillas explica que es una sustancia secreta, pero que cuenta con todos los permisos sanitarios y que poseen un certificado para demostrar que en dos horas de contacto desactiva al 97% del virus.

Cómo comprarla

Esta nueva mascarilla ya con viricida, patentada también como la anterior versión, estará disponible en aproximadamente dos semanas y los pedidos podrán realizarse en la propia tienda online que han decidido crear en Bionicia y en la plataforma Amazon.

Lo que han patentado es un método propio de filtración llamado Proveil. Se trata, explican en la empresa, de “una capa extremadamente delgada de nanofibras, con diámetros más de diez veces inferiores que las fibras convencionales, que proporciona una filtración mecánica altamente efectiva para partículas pequeñas en el aire sin que la eficiencia se reduzca con el tiempo”.

Tipos de mascarillas

Actualmente, existen el mercado tres tipos de mascarillas. Por un lado están las higiénicas, que sirven exclusivamente como complemento a las medidas de distanciamiento e higiene recomendadas por el Minsiterio de Sanidad. Éstas son las que menos protegerían de un posible contagio.

Por otro lado, están las de uso más corriente, que son las quirúrgicas. En este caso, evitan la transmisión de agentes infecciosos, ya que están diseñadas para evitar la dispersión, filtrando el aire exhalado. En definitiva, se trata de que la persona que la porta no transmita infección a su alrededor, pero no la protege del exterior.

Y finalmente están las mascarillas EPIs que, además de proteger a los de alrededor evitando que se disperse el aire exhalado, evita también la entrada de partículas contaminantes.