El valor de la producción de cereal suma 52 millones de euros en 2012
La Junta insta a los agricultores a "concentrar la oferta" y organizarse en cooperativas
El valor de producción de los cereales en Córdoba ascendió a 52 millones de euros en la campaña de 2012, según informó ayer el delegado de Agricultura, Francisco Zurera, quien señaló que el trigo es el principal cereal que se siembra en la provincia. El delegado informó también que la superficie de cultivos herbáceos en la provincia es de 218.000 hectáreas, lo que supone un tercio de la superficie cultivada en toda la provincia.
Zurera indicó que el valor de la producción de 2012 -el global de todos los cultivos asciende a 76 millones de euros- es similar al de ejercicio anteriores, si bien, reconoció que la del año pasado fue una campaña "dispar", debido a las intensas lluvias que se registraron a lo largo del mes de mazo y los daños que produjeron. Así, incidió en que la campaña ha estado condicionada por las precipitaciones, por lo que los rendimientos también han sido "dispares" y ha habido, además, "una alta heterogeneidad", ya que en parcelas de la misma comarca los daños han sido diferentes.
Prueba de ello, son los resultados del rendimiento de los diversos cultivos. Así las cosas, el trigo duro -el mayoritario en la provincia- se ha sembrado "casi exclusivamente en las campiñas y su rendimiento medio ha sido de 3.000 kilos por hectárea-", según expuso el delegado, quien añadió que en el caso del trigo blando se ha registrado un rendimiento medio de 2.500 kilos por hectárea; en este caso, la producción ha sido de 1.500 kilos por hectárea. A pesar de todo, Zurera consideró que la pasada campaña no "fue tan mala como la anterior, en la que prácticamente no hubo recolección".
La provincia, según los datos ofrecidos por Zurera, cuenta hasta la fecha con una quincena de industrias agroalimentarias de harinas y pastas a las que se suman 27 empresas de piensos. Los datos provisionales de la campaña 2012-2013 desvelan también que en la provincia hay 137.000 hectáreas de cereal, de las que 50.417 son de trigo duro, 33.120 de trigo blando, 22.640 de tranquillón, 21.001 de avena y 7.281 de cebada. A toda esta superficie se añaden las 60.000 hectáreas dedicadas al cultivo del girasol. El número de agricultores que trabajan estas tierras es de 7.300, según los mismos datos.
En su intervención, el delegado de Agricultura subrayó "el gran potencial agrícola" de la provincia e insistió en la necesidad de "seguir produciendo trigos de calidad que sean reconocidos en los mercados". Por ello, continuó, "hay que generalizar la norma de calidad de los trigos y comercializar lotes de calidad homogénea".
Para Zurera, uno de los problemas que ha de corregir el sector del cereal es el de concentrar la oferta "con una mejor vertebración". A su juicio, "no nos basta con ser buenos productores, sino también ser buenos empresarios". Por ello, abogó por la "creación de instrumentos que ayuden a defender la producción", tales como las cooperativas o las sociedades de transformación "para aglutinar al agricultor en origen". Así, Zurera manifestó que el "agricultor no puede vender ahora su producción como se hacía hace décadas porque es imposible". "Hay muchos cerealistas que venden por su cuenta y eso supone ofrecer ventajas a los distribuidores, añadió. El delegado aseguró que esta fórmula servirá, además, para mejorar los ingresos del sector y ofrecer precios más competitivos. El sector, apuntó, "necesita organizarse y concentrar la oferta para hablar de tu a tu a la distribución". Por ello, incidió en la necesidad de llevar a cabo una "clasificación de trigos por calidad" y trabajar en la "diferenciación en los mercados y la organización del sector productor". Todo ello, según Zurera, "son claves para ser más competitivos".
El cultivo de cereal ecológico -que se extiende en 8.285 hectáreas- fue otro de los aspectos a los que aludió el delegado de Agricultura durante su comparecencia y recordó que "tiene más demanda que oferta".
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