Solo uno de los diez institutos públicos elegidos por Educación desarrollará en Córdoba durante el curso 22-23 el Bachillerato General, una de las novedades que aporta la reforma educativa (Lomloe) aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez que ha suscitado no poca polémica. La escasa demanda que ha tenido entre los estudiantes es el único motivo por el que la oferta se ha reducido de forma tan considerable, pues hay que recordar que esta modalidad, que viene a completar un abanico con cuatro alternativas, fue anunciada ya con el periodo de escolarización en marcha.

A principios de verano, concretamente el pasado 23 de junio, la Consejería de Desarrollo Educativo y FP dio a conocer, mediante publicación en el BOJA, los institutos que habían sido propuestos para contar este curso con el Bachillerato General. En Córdoba, el listado lo componía una decena de centros, cinco en la capital, cuatro en la provincia y el Instituto Provincial de Educación Permanente (IPEP) que ofrece formación online. Aquella nómina era provisional, y tenía que ser aprobada ya en septiembre, antes de la vuelta de las aulas que se confirmó el pasado día 15.

Una vez confirmada la definitiva, solo uno de esos diez institutos desarrolla esta modalidad en el curso 22-23: el Luis Carrillo de Sotomayor de Baena. Ninguno de los cinco de la capital, que diversificaban la oferta por toda la ciudad -el Séneca (en el distrito Poniente Sur), el Góngora (Centro), el López Neyra (Arroyo del Moro), el Blas Infante (Levante) y el Ángel de Saavedra (Santa Rosa)-, ha puesto en marcha el Bachillerato General, algo que tampoco harán los otros tres de la provincia: el Marqués de Comares y el Sierra de Aras, ambos en Lucena, y el Francisco de los Ríos, de Fernán Núñez.

El criterio seguido por la Junta de Andalucía para poner en marcha esta modalidad, novedad introducida a raíz de la aplicación de la Lomloe, es que los institutos tengan al menos cuatro líneas de Bachillerato, o lo que es lo mismo, cuatro unidades (aulas) por cada curso. A partir de ahí, la demanda ha marcado que se lleve a cabo. Y en el caso de la provincia, solo en un centro ha sido solicitado por al menos diez alumnos, lo que demuestra el poco interés de los estudiantes por la especialidad General, bien por no atender a sus expectativas o por falta de información, pues la oferta se lanzó ya iniciado el proceso de escolarización, manteniendo las otras tres opciones: Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales, y Artes. 

La finalidad 

La Lomloe establece esta modalidad para aquellos adolescentes que, con 16 años, no tienen aún decidido su futuro laboral y prefieren matricularse en un Bachillerato cuyos conocimientos le permitan en dos años aspirar a un amplio abanico de carreras que se sitúan en las ramas de las Ciencias de la Salud y las Sociales. Con todo, muchos expertos indicaron que la nueva modalidad servirá de vía a muchos alumnos que no han obtenido nota suficiente para entrar en la FP de grado medio deseada y que, tras cursar esta modalidad que ahora se estrena, se matricularán en un ciclo formativo superior.

Respecto al currículo, al margen de las asignaturas comunes, para el primer curso la materia de modalidad obligatoria es Matemáticas Generales, dirigida -según precisó en su día el Ministerio de Educación- a "la resolución de problemas y al análisis de información, con especial atención a contextos no matemáticos, a su relación con otras materias y con la realidad". En cuanto a las optativas, ha de ofertarse obligatoriamente la asignatura Economía, Emprendimiento y Actividad Empresarial.

Para el segundo curso, que comenzará en septiembre de 2023, la materia obligatoria de modalidad será Ciencias Generales, que aportará "una formación básica" de las cuatros disciplinas científicas fundamentales: Física, Química, Biología y Geología. Respecto a las optativas, los centros han de incluir la de Movimientos Culturales y Artísticos, que "contribuye al conocimiento de la propia cultura, y, además, a una formación integral del alumnado en valores ciudadanos, en el respeto a la diversidad de las expresiones artísticas y en la promoción del diálogo entre culturas". 

En cuanto a las materias comunes, en el primer curso serán Filosofía, Lengua y Literatura Castellana I, Idioma Extranjero I y Educación Física, mientras que en el segundo serán Historia de la Filosofía (la ley educativa de Rajoy eliminó su obligatoriedad en ese curso), Historia de España (aunque se le dará un enfoque contemporáneo desde 1812), Lengua y Literatura Castellana II e Idioma Extranjero II.