Denuncian la electrocución de numerosas aves en la comarca cordobesa del Guadajoz: "Es una trampa mortal"
Medioambiente
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Groden-Ecologistas en Acción ha denunciado el aumento de la muerte de aves por electrocución en la comarca cordobesa del Guadajoz-Campiña Este, el episodio más reciente el de cuatro cigüeñas blancas que han sido localizadas con "claros síntomas" de haber sufrido una descarga en el paraje del Barranco Hondo, junto a la vega del río Marbella.
El colectivo ha advertido de que, desde que empezó a recopilar datos en 2001, han sido más de 40 los animales encontrados que murieron en apoyos y tendidos eléctricos. "Desde entonces el aumento ha sido constante, principalmente por la intensificación de los tendidos eléctricos en el campo y en los que en ningún momento se tomaron medidas para evitar las colisiones y electrocuciones de aves", denuncia la asociación conservacionista.
"A primera vista puede parecer una cifra pequeña o insignificante, pero se trata solo de una mínima muestra de lo que con toda seguridad es una mortandad mucho mayor y que pasa desapercibida", advierten, pues explican que los voluntarios llevan a cabo un trabajo de campo altruista, recorriendo postes y líneas eléctricas de forma aleatoria y a veces por avisos de particulares.
Corredores ecológicos en los viajes migratorios
En los últimos años, concretan que las prospecciones de campo se centran en parajes concretos como la vega del río Guadajoz y el Marbella que son lugares de paso y descanso de multitud de aves que utilizan estos espacios como corredores ecológicos en su viajes migratorios. Las especies más afectadas son búho real, águila culebrera, cigüeña blanca, cuervo común, busardo ratonero, cernícalo común y buitre leonado.
La electrificación del medio rural por el aumento y expansión del olivar de regadío en todo el término de Baena está favoreciendo una auténtica tela de araña de apoyos y líneas eléctricas que se han convertido en una trampa mortal para las aves a pesar de que los nuevos tendidos eléctricos, advierten. A todo ello hay que unir los grandes tendidos eléctricos que se están construyendo para transportar la energía generada en proyectos solares.
La electrocución suele ocurrir porque las grandes y medianas aves utilizan los apoyos eléctricos como posaderos y oteaderos para cazar o descansar. Las épocas de reproducción y migración son las más críticas. Por otra parte, la colisión con los tendidos se sucede porque las aves no son capaces de evitar los cables y el comportamiento gregario de algunas especies que vuelan muy juntas hace que muchas de ellas choquen con los tendidos.
Petición a la Consejería de Medio Ambiente
Todos estos casos han sido puestos en conocimiento de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, exigiendo que se tomen las medidas oportunas para evitar más bajas. Ecologistas ha agradecido que las empresas grandes compañías eléctricas hayan comenzado a modificar los apoyos más conflictivos, aunque "tímidamente", aunque lamentan que "muy pocos propietarios a título particular han tenido a bien modificar y rectificar algunos apoyos eléctricos de su propiedad donde es frecuente la electrocución de aves".
Tampoco el Real Decreto 1432/2008 de 29 de agosto que establece medidas para la protección de la avifauna contra la colisión y electrocución en líneas eléctricas -lamentan- ha servido para solucionar el problema porque solo se aplica en los espacios naturales protegidos y "la avifauna no entiende de límites geográficos y administrativos". "Es necesario que el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico modifique este Real Decreto para todo el territorio español independientemente de grado de protección", reclaman.
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