La autopsia determina que el menor murió por ahogamiento
El juez abre una causa para aclarar si el deceso fue accidental o si existe responsabilidad
El joven de 15 años que el lunes falleció en el parque acuático Aquasierra, en Villafranca de Córdoba, lo hizo por un "síndrome anÓxico por sumersión", esto es, por ahogamiento. Así lo determina el informe forense preliminar que ayer recibió el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Montoro, según informó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). El juez, tras autorizar ayer el levantamiento del cadaver, solicitó un informe de la Policía Judicial y otro a la Guardia Civil de la localidad del Alto Guadalquivir para investigar cómo se produjo el trágico suceso. Además del estudio de estos dos informes, el juez citará en las próximas semanas a quienes fueron testigos de los hechos y a quienes auxiliaron al joven, de origen marroquí, desde el primer momento.
Esta instrucción se lleva a cabo para poder determinar si la muerte se debió a un accidente, como todas las fuentes apuntaron el lunes, o si, por el contrario, pudiera existir alguna irresponsabilidad, causa de una presunta falta penal o incluso de un delito de homicidio, informó el TSJA. Hasta la tarde de ayer, ninguna parte se había personado en la causa, aunque el abogado de la familia informó ayer de su intención de tomar parte en el procedimiento. El letrado anunció que estudiará denunciar al parque acuático y al instituto de Educación Secundaria Miguel de Cervantes de Lucena, donde estudiaba el chico, según informó Europa Press.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, apuntó ayer en Sevilla que el joven, que había acudido al parque acuático en una excursión con el centro educativo, "se desplomó, cayó al suelo y posteriormente al agua", según la información de la dirección del parque. "El equipo de socorristas intentó reanimarle, pero no fue posible", añadió. El joven vivía en Lucena con sus padres "desde que tenía un año" y poseía permiso de residencia temporal con validez hasta el 13 de agosto. "Hasta el momento no hay constancia de que se hubiera solicitado el permiso de residencia de larga duración", informó.
Respecto al progenitor, poseía permiso de larga duración con caducidad el próximo el 13 de agosto. En este caso, "sí consta que hay petición de cita para su renovación en la administración", que "se debe hacer cada cinco años", detalló. El progenitor acudió ayer con su familia a la Subdelegación del Gobierno en Córdoba para "renovar la documentación" del permiso de larga duración, si bien en este caso lo ha prorrogado tres meses más, tras lo cual dio a las gracias a la Administración por el trato.
El fallecimiento causó ayer una gran consternación en Lucena. La Asociación de Inmigrantes de la localidad pidió que se lleve a cabo "una investigación justa y completa para la familia". El colectivo valoró, además, la colaboración del instituto y del Ayuntamiento, con el alcalde, Juan Pérez (PSOE), a la cabeza.
Mientras, la dirección del parque defendió de nuevo la labor de los socorristas, que "han actuado como tenían que actuar". La gerente del parque acuático, Juana María Obrero, ya informó a El Día de que el accidente podría haber tenido su origen en un desvanecimiento que habría sufrido el menor, que en ese momento se encontraba en el filo de la piscina. Al perder el conocimiento, pudo golpearse y caer al agua, dijo. Según la gerente, el equipo de socorristas activó de inmediato el protocolo de asistencia, que "funcionó correctamente". El joven fue trasladado a las dependencias del botiquín, donde el personal del parque intentó reanimarlo sin éxito. Allí se determinó su muerte, informó la gerente, quien expresó su pesar por el trágico suceso.
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