Los alcaldes y alcaldesas de las 28 localidades ubicadas en la zona Norte de Córdoba e integradas en las mancomunidades de municipios Los Pedroches y Valle del Guadiato han anunciado un "periodo de movilizaciones" para exigir al Gobierno central, la Junta de Andalucía y la Diputación de Córdoba que acometan de manera urgente las obras necesarias para llevar agua potable a los hogares de los 80.000 vecinos del Norte de la provincia. Desde el mes de abril, debido a la contaminación del agua de La Colada, el suministro se realiza con camiones cisterna.

En una reunión celebrada este miércoles en Peñarroya-Pueblonuevo, los regidores -que pertenecen al PP, el PSOE e IU- se han dejado fotografiar juntos en señal de unidad antes de anunciar las protestas. Entre otros, en la imagen se pueden ver el alcalde de Pozoblanco y presidente de la mancomunidad de Los Pedroches, Santiago Cabello (PP); el alcalde de Añora, Bartolomé Madrid, también diputado nacional popular, o el regidor peñarriblense, Víctor Manuel Pedregosa (PSOE), que ha hecho de anfitrión.

Los mandatorios locales reclaman que se dé "absoluta prioridad" a la conexión del pantano de Puente Nuevo con la estación potabilizadora ubicada en Sierra Boyera como "garantía de suministro" a vecinos que llevan sin agua potable desde el mes de abril. Y es que, en su opinión, solo esta medida ofrece "garantías" para llevar a los vecinos agua potable, característica que, "por desgracia, no se está garantizando a la población de estos municipios desde hace varios meses", lamentan en el comunicado difundido en la mañana de este miércoles.

Por este motivo, han solicitado al Gobierno de España las obras de conexión entre los pantanos mencionados con al finalidad de garantizar el trasvase de agua por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, así como el adelanto de las obras que garanticen la potabilización de las aguas del pantano de La Colada tanto a la Diputación de Córdoba como a la Junta de Andalucía.

En este sentido, los alcaldes y alcaldesas del Guadiato y Los Pedroches han anunciado un "período de movilizaciones" con el fin de reivindicar la adopción de todas las medidas necesarias por parte de las administraciones competentes en la materia para que el suministro de agua potable "quede garantizado a la mayor celeridad posible". Para ello, exigen que se declare la "urgencia de las obras a acometer" y que las mismas "aporten soluciones definitivas a un problema de escasez de agua que empieza a dejar de ser temporal o coyuntural para convertirse en permanente o estructural".

Para esta nueva etapa, han solicitado "la participación, la comprensión y el apoyo" de los ciudadanos en las "acciones que se van a emprender y poner en marcha de aquí en adelante para reivindicar un derecho de todos".

Seis meses para potabilizar La Colada

A finales de septiembre, la Empresa Provincial de Aguas de Córdoba (Emproacsa) anunció que las obras de emergencia en el embalse de La Colada con el objetivo de reducir la contaminación del agua que desde allí llega hasta la planta potabilizadora (ETAP) de Sierra Boyera tardarían seis meses, un plazo en el que los vecinos, hipotéticamente, volverían a tener agua potable. Pero esta medida, de nuevo, sería provisional.

Pues, como incide el presidente de Emproacsa y de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, la única solución definitiva es "el enlace con Puente Nuevo", como demandan los alcaldes, y que Sierra Boyera disponga de una "gran potabilizadora de última generación". La actual data de 1975 y en ella "no se ha puesto un euro desde hace años", según Fuentes.

La única certeza es que una flota de camiones cisterna abastece desde la pasada primavera a los 80.000 vecinos del Norte de la provincia, con la incomodidad que ello implica y las dificultades, debido a la contaminación del agua del grifo, que procede de La Colada tras agotarse el pantano de Sierra Boyera, que es el que inicialmente abastecía a todo el Norte de la provincia. La sequía persistente no hace más que agravar la situación, y hace ya varios meses que nació la plataforma Unidos por el Agua, que agrupa a colectivos y organizaciones sociales de ambas comarcas y que ya ha protagonizado varias movilizaciones ciudadanas que, aunque de gran impacto, no parecen haber tenido efecto alguno en la toma de decisiones de las administraciones competentes. El llamamiento este miércoles de los propios alcaldes a la movilización hace subir de nivel las protestas.