Agacor alerta de que en el Norte de Córdoba hay unas 400 explotaciones ganaderas afectadas por la lengua azul

La Asociación de Ganaderos y Agricultores de Córdoba (Agacor) ha alertado de que entre el Valle del Guadiato y Los Pedroches hay afectadas por lengua azul unas 400 explotaciones ganaderas, según los datos facilitados por sus asociados.

En estas explotaciones, "la mortalidad oscila entre el 3% y el 30% solo en muertes, más los daños de animales con abortos e infectados que están en tratamientos", señalan.

Agacor ha denunciado en un comunicado el "abandono, la falta de respuesta y la inacción de la administración andaluza ante los focos de enfermedad de lengua azul que está llevando a la desesperación a los ganaderos cordobeses", especialmente en las comarcas del norte de la provincia.

Según indican desde la asociación, "su única respuesta ha sido vacunar y desinsectar sin unas pautas claras que han hecho que se acreciente el problema debido a la vacunación de rebaños que ya tenían presencia del virus en sus animales y no se había declarado el foco oficialmente, y desconocerlo, por tanto, el ganadero".

Agacor asegura que es "totalmente mentira" que los ganaderos no hayan realizado vacunaciones, ya que "el virus está afectando a rebaños vacunados de los cuatro serotipos existentes". "Se ha descargado la responsabilidad al ganadero por haber solicitado la libertad de movimientos y la vacunación voluntaria, petición que ha interesado más a las grandes cooperativas y empresas del sector que a los propios ganaderos", puntualiza.

Estos han visto "que por esa vacunación voluntaria la administración ha perdido el control de la enfermedad y solo cuenta, a día de hoy, con los datos que los propios ganaderos le facilitan".

La asociación añade que esa vacunación voluntaria "también ha creado un reservorio del virus en el ganado bovino, que igualmente debe ser vacunado". Esto es, "de nada sirve en explotaciones tanto mixtas como exclusivamente de bovino que vacunemos a las ovejas y dejemos a las vacas como reservorio y vector de contagio".

Esta situación está provocando "unas pérdidas inasumibles no solo de ganado muerto, sino también de abortos en hembras jóvenes que no se sabe cómo acabarán y si serán productivas", apuntan desde Agacor.

Las demandas del sector

La asociación solicita que se ponga a disposición de los ganaderos las vacunas del serotipo 1, 3, 4 y 8 "de forma gratuita" a través de las Agrupaciones de Defensa Sanitaria Ganadera (ADSG), así como los gastos de aplicación veterinaria.

También piden gratuidad en "todos los antiinflamatorios y antibióticos retirados de las ADSG desde la fecha de aparición del primer foco declarado oficialmente hasta la entrada del invierno".

Por otro lado, exigen "gratuidad de desintectantes para su aplicación tanto al ganado como a las instalaciones ganaderas hasta el control de la enfermedad" y la "creación de un fondo urgente de contingencia para llevar a cabo indemnizaciones desde ya a todas las explotaciones afectadas con los datos que obran actualmente en poder de las Oficinas Comarcales Agrarias (OCA)".

Además, desde Agacor solicitan un estudio epidemiológico en explotaciones que sí están vacunadas y están dando casos positivos de serotipo 3 y 8, a través de toma de muestras por parte de los servicios veterinarios de la administración andaluza.

También quieren que se analicen y se indemnicen "los daños producidos por abortos en las próximas parideras mediante el cálculo de censo de cabaña en edad de parir y corderos comercializados pasada la campaña de Navidad, que es donde realmente se van a poder cuantificar los daños directos en los abortos y malos partos de los animales".

La asociación quiere que se establezcan "unas pautas claras y consensuadas de vacunación y postratamiento de animales infectados". En su opinión, hay que "repensar la vacunación voluntaria, tanto de ganado vacuno como de ovino, para poder controlar de forma real la expansión de la enfermedad". "La administración no puede controlar el problema y dar soluciones mientras el virus se mueve descontroladamente por todo el país", puntualiza.

Por último, exigen que se ponga a disposición de los ganaderos vehículos para la retirada de cadáveres en zonas buitreras ya que, debido a la cantidad de ganado muerto, "los animales se encuentran en muchos casos en descomposición, creando otros focos de infecciones a las explotaciones, no acudiendo las aves carroñeras para su aprovechamiento y eliminación".