Lola Cristina Mata abre la semana de Pasión con un emotivo pregón

Un quejío de emoción inundó el Teatro Liceo de Baena en la mañana del domingo. Un emocionado público aplaudió en pie -y lo hizo además durante varios minutos- a Lola Cristina Mata Casado, la pregonera de la Semana Santa de 2011 en esta localidad, quien a lo largo de casi dos horas de canto desmenuzó con ternura, amor, religiosidad y sentimiento el desarrollo de la celebración cofrade en este municipio de la Subbética.

A través de una perfecta oratoria, Mata Casado homenajeó al judío en uno de los lances del pregón: "Ser judío es un sentimiento de amor profundo por el color de una cola, mis coliblancos. Ser judío es un sentimiento de profundo respeto por el color de la otra cola, mis colinegros. ¡Qué hermosa rivalidad, qué hermosa se ha hecho en esta tierra! ¡Coliblancos en la noche y a luz del sol colas negras!".

Con un auditorio entregado, que interrumpió con aplausos una y otra vez su canto, la pregonera rindió tributo igualmente a los hermanos de San Juan, a los que pertenece. A ellos se dirigió diciendo un "soy sanjuanera porque desde que vi la luz he visto túnicas rojas de terciopelo, cruces griegas, baquetas gruesas y tambores roncos y en ellos di los primeros toques que mis tíos, jovencillos sanjuaneros, me enseñaron".

Uno de los momentos más excelsos del pregón tuvo lugar al hablar en verso del desarrollo de la mañana del Viernes Santo: "Nazareno navegante, andas de madera y plata. Agonía al caminar, alegórica mirada. Zozobrantes los tambores, la turba está preparada. Anunciando la llegada, aclamando que esperabas, redoble de colinegros entrando por la muralla, en un balcón la saeta, por el sufrir de tu alma".

Con lágrimas en sus ojos durante muchos momentos de un pregón que rezó de memoria, Mata Casado concluyó su texto llevándose consigo a los más de 500 asistentes a este pregón: "¡Qué nuestros corazones sigan latiendo, porque el cielo nos espera, ese cielo que en Semana Santa se llama en Baena!", concluyó.