Ya es una realidad. La Denominación de Origen (DO) Protegida de Lucena, que amparará los aceites de la zona Sur de Córdoba, ha superado ya el último obstáculo administrativo a nivel autonómico para la puesta en marcha de este marchamo de calidad. Después de varios meses de espera, el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) recogió ayer la resolución del consejero de Agricultura, Martín Soler, en la que dispone "emitir decisión favorable para que Lucena sea registrado como Denominación de Origen Protegida y publicar el pliego de condiciones que deben cumplir los aceites de la citada denominación", precisa Soler.

El presidente de la comisión promotora de la DO Lucena, José Luis Toledado, confirmó ayer a El Día que "éste era el último trámite que competía a la Junta", por lo que ahora sólo queda el visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, "algo que llegará en unos 25 días aproximadamente y, a partir de ahí, a empezar a calificar", explicó.

Toledado mostró su satisfacción por la labor de la gestora y sentenció que "hemos llegado a la meta después de un largo trabajo; ahora sólo nos queda envasar y sacar nuestros aceites a la calle con el sello de la DO Lucena". El presidente avanzó que "si no hay contratiempos, que creemos que no los habrá, las primeras botellas amparadas con aceite del año podremos verlas en los mercados para la próxima primavera".

La entidad promotora de este sello de calidad está formado por casi una veintena de firmas "que confío en que sigan con nosotros y que incluso se vayan incorporando nuevas empresas", comentó José Luis Toledano, quien también avanzó que en las próximas semanas se tendrá que elegir ya la composición del Consejo Regulador y del presidente, de acuerdo con la normativa vigente. El reglamento tendrá que ser remitido también a las autoridades europeas para que den su visto bueno a la denominación lucentina, si bien la aprobación podría tardar unos dos años, aunque eso no paraliza la posibilidad de comercializar los caldos de la zona con el marchamo de calidad.

La zona geográfica que comprende la Denominación de Origen Lucena está situada al sur de la provincia y comprende diez municipios, que se circunscriben en la zona más meridional de Córdoba: Aguilar de la Frontera, Benamejí, Encinas Reales, Iznájar, Lucena, Montilla, Moriles, Monturque, Puente Genil (la margen derecha del término municipal, limítrofe con la zona conocida como Miragenil) y Rute. La comarca de elaboración y envasado coincide con la de producción y abarca una superficie total de 126.747 hectáreas, de las que 72.438 se dedican al cultivo del olivar. Prácticamente, todos los municipios emplean más del 40% de su superficie al cultivo del olivo, según recoge el reglamento de la nueva denominación de origen del territorio cordobés.

Todos los envases de aceite de oliva virgen extra amparado por la DO llevarán una contraetiqueta identificativa, en la que figurará obligatoriamente la mención Denominación de Origen Lucena, el logotipo y un número correlativo y único para cada envase y todas ellas serán expedidas exclusivamente por el Consejo Regulador del marco.

La comercialización de los zumos de oliva acogidos a la DO lucentina se realizará en dos tipos de envases: cristal o lata. En cuanto a los volúmenes de cada uno de ellos, el reglamento detalla que las botellas de cristal podrán tener una capacidad de un litro, 0,75, medio litro o 0,25. En cuanto a las latas, será de dos tipos, de cinco litros o de 2,5.

El requisito del envasado en origen tiene "la clara finalidad de proteger mejor la calidad y autenticidad del producto y, en consecuencia, la reputación de la denominación de origen, cuya responsabilidad asumen los beneficiarios plena y colectivamente", señala el reglamento. Todas las inspecciones en almazara o envasadora se realizarán por un organismo que cumpla con la norma ISO 17020 y todas las determinaciones analíticas serán realizadas en laboratorios especializados.