La Sociedad Cordobesa de Historia Natural demanda a las administraciones y a la ciudadanía la protección de los valores paisajísticos y naturales de Guadalcázar en un contexto que viene siendo protagonista durante los últimos meses: la implantación de una mega planta de energía solar a escasos 400 metros del municipio.

Aunque no lo mencionan en el comunicado que han difundido, la estrategia de esta sociedad protectora está clara: hacer ruido y concienciar a los habitantes del municipio, así como a toda la sociedad cordobesa, para despertar las protestas contra la "burbuja de fotovoltaicas" que se espera en la provincia para los próximos años.

De hecho, Guadalcázar (1.559 habitantes) ya gritó un "no" rotundo, a principios del mes de octubre, a la instalación de una mega planta de energía solar que, según el proyecto presentado por el grupo promotor, Ric Energy, ocupará una parcela de 60 hectáreas y generará 20 megavatios. La localidad no se quedó de brazos cruzados y la plataforma SOS Guadalcázar inició la presentación de alegaciones con una invitación a los vecinos para que igualmente se opongan a su construcción. Todo ello con el beneplácito del Ayuntamiento.

El alcalde del municipio, Francisco Estepa, ha reconocido a el Día su posición contraria a la implantación en aquellos espacios "en los que se haya demostrado que pone en riesgo la flora y la fauna" y muestra su preocupación por el impacto visual "nada agradable" que provocaría en el paisaje de la localidad y en los vecinos que salgan a pasear, aunque sus competencias sean pocas ya que la instalación de estas placas solares corresponden a la Junta de Andalucía. Respecto a los beneficios que dejaría en el municipio, Estepa ha confirmado que "sí los hay", principalmente el empleo generado durante el período de construcción de las placas -el mantenimiento no requiere apenas personal- y luego el cobro del Impuesto de bienes inmuebles (IBI) más el Impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), así como todo el empleo y riqueza generada de manera indirecta.

La mega planta de Guadalcázar por su condición geográfica de campiña, afectaría a los cultivos de cereal, sobre todo trigo, que serían sustituidos por placas solares durante el período de arrendamiento de estas tierras, una apuesta por energías renovables a través de megaplantas que no convence a Myriam, coordinadora regional de la Sociedad de Historia Natural, que lo califica como un "impacto irreversible" en la biodiversidad, "si no se regula" y aboga por compatibilizar la vida de estas especies con pequeñas plantas fotovoltaicas de bajo de autoconsumo. 

Mientras tanto, el alcalde se muestra "expectante" por ver la resolución, pero afirma que este tipo de cosas van para largo.

Riqueza en la biodiversidad de Guadalcázar

Guadalcázar alberga en su término municipal un patrimonio natural de gran interés para la conservación de la biodiversidad de la Campiña de Córdoba. En los parajes de El Hecho, la Dehesilla, Chozas de la Parrilla, y los arroyos del Guadalmazán, Masegoso y la Marota, se han localizado hábitats de interés comunitario y especies muy interesantes de flora y fauna de la península ibérica, algunas de ellas amenazadas.

Carteles contra la planta solar en Guadalcázar.

Respecto a la vegetación en algunos de estos parajes se encuentran formaciones arbustivas singulares, como es el caso de la mayor mirteda de la provincia, unas 4 hectáreas ocupadas mayoritariamente por arrayán o mirto (Myrtus communis), con algunos ejemplares de grandes dimensiones. Además, algunas zonas del paraje de la Dehesilla están cubiertas por pastizales dominados por la gramínea Chaetopogon fasciculatus, desarrollados sobre suelos temporalmente encharcados, que se desarrollan tras secarse las extensas charcas someras que se forman en los años lluviosos. Esta vegetación herbácea se corresponde con un hábitat prioritario de interés comunitario, contemplado en la Directiva Hábitats, el denominado “charcas temporales mediterráneas”.

En cuanto a la flora de interés, en el paraje de la Dehesilla se encuentra la mayor población del narciso de Cavanillas (Narcissus cavanillesii) de la provincia de Córdoba, un pequeño narciso amarillo que está incluido en el Listado Andaluz de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Decreto 23/2012, de 14 de febrero). En las zonas encharcables antes citadas se localiza también un helecho amenazado, Marsilea strigosa, (trébol de cuatro hojas), incluido en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas en la categoría de “Vulnerable”. 

Y respecto a la fauna en los parajes de la Dehesilla, El Hecho y pastizales aledaños se ha localizado una población de una pequeña y curiosa mantis, sin alas, Apteromantis aptera, catalogada como vulnerable en varios libros rojos (Andalucía, España) e incluida en el Listado Andaluz de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Otros insectos de interés de los que se tiene constancia de su presencia son Harraphidia laufferi, una especie de mosca serpiente que tan solo se conocía de una cita del norte de la provincia, y un pequeño grillo, Stenonemobius gracilis, muy escaso en la península ibérica y asociado a pastizales húmedos. 

La fauna de anfibios cuenta con especies interesantes, como es el caso de una de las dos únicas poblaciones de tritón pigmeo (Triturus pygmaeus) conocidas en la campiña, en las Chozas de la Parrilla y en La Dehesilla. La pobreza piscícola de los arroyos de la Campiña contrasta con las interesantes comunidades de peces del arroyo Guadalmazán, que alberga cuatro especies autóctonas de peces.

Charca temporal

Entre las aves destaca la presencia de milano real (Milvus milvus), especie de rapaz incluida en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas en la categoría “En peligro de extinción”, que cuenta con un dormidero invernal de más de 100 individuos. Esta zona es además lugar de dispersión de una de las rapaces más amenazadas del mundo, el águila imperial ibérica (Aquila adalberti). Además de estas rapaces, en estos parajes se pueden observar varias especies de aves que se encuentran en regresión como el alcaraván (Burhinus oecdinemus), el sisón (Tetrax tetrax) o el alzacola (Cercotrichas galactotes), que se encuentran ligadas a los medios agrícolas. Las dos últimas están incluidas en el catálogo andaluz de especies amenazadas en las categoría “vulnerable”.

"Las administraciones y la ciudadanía en general deberían ser conscientes de la singularidad paisajística y de la riqueza natural de Guadalcázar. Es necesario poner sobre la mesa la necesidad de proteger los sistemas agrarios y ganaderos (en régimen extensivo) tradicionales, que han permitido conservar este paisaje y esta  relevante biodiversidad, en la actualidad cada vez más amenazada" concluye el texto de la Sociedad Cordobesa de Historia Natural.