Día del orgullo provincial

Besos por aquí, abrazos por allá. Va a empezar la sesión en el Palacio de la Merced y los políticos cordobeses le demuestran con ósculos a Susana Díaz que lo que necesitan también los ciudadanos y los partidos es, por supuesto, amor de sus gestores, amor demostrado en el día del orgullo, del orgullo no sólo Lgtbi, también del orgullo de ser de la provincia de Córdoba. Susana ha llegado para arropar a su amigo Antonio Ruiz en su investidura como presidente por segunda vez de la Diputación. Y tras esas demostraciones de afectos , los 27 empiezan a jurar o a prometer sus cargos.

Comienza jurando el socialista Esteban Morales –demostrando que el juramento no es exclusividad de la derecha y que la promesa no solo lo es de la izquierda– y concluye el popular Guillermo González jurando también. Al final, los “sí, prometo” le ganan a los “sí, juro” por 16 a 12. Pero hay formas de prometer y formas de prometer, como demuestran Alba Doblas (IU) y Ramón Hernández (IU), que prometen por imperativo legal acordándose de la República; y hay formas de jurar y formas de jurar, como la de Rafael Saco (Vox) que “por España, sí”, jura.

Y llega el momento de votar al presidente. Tres opciones según las candidaturas presentadas: Antonio Ruiz (PSOE), Miguel Castellano (Cs) y Rafael Saco (Vox). El escrutinio dicta que el socialista se lleva 16 votos –los de su partido y los de IU–, mientras que los dos diputados de Cs votan a su candidato –el orgullo es el orgullo– y todo apunta a que Rafael Saco no se vota a sí mismo y se abstiene –tampoco pierde el orgullo–. Lo mismo que no hay que ser politólogo para saber que los ocho votos en blanco son los del PP –para orgullo el suyo–.

Fumata blanca. Antonio Ruiz recibe el bastón de mando y la medalla de presidente. Llega la hora de que cada grupo político demuestre, vía discurso, el orgullo provincial que siente, unos discursos en los que se deja sentir una cierta pasión por el Club de los poetas muertos. ¡Oh, presidente, mi presidente! les falta decir a más de uno después de echar mano de frases lapidarias de personajes célebres difuntos.

Comienza el portavoz de Vox. Saco se olvida de la poesía y revela que nada mejor que la vuelta a casa para servir y no para servirse. “Muchos no lo saben, pero hace unos 20 años que comencé mi carrera profesional en esta casa, gracias a una beca fruto de un convenio con la Universidad de Córdoba en el entonces Negociado de Personal”, detalla.

Tras él, Miguel Castellano termina su discurso parafraseando a Adolfo Suárez con una frase consejo del expresidente del Gobierno a la nueva Corporación: “El futuro no está escrito porque sólo el pueblo puede escribirlo”. Frase que luego tradujo al día del orgullo provincial. “[Oh, presidente, mi presidente], gobierne para todos los ayuntamientos, sean del color político que sean”.

Le toca el turno al portavoz de IU, Francisco Ángel Sánchez, que comienza su intervención recordando que “es el día del Orgullo” con una frase de Simone de Beauvior, reivindicando “el respeto a la diversidad, trabajar por una sociedad más igualitaria donde nadie se sienta discriminado por su condición sexual y defender desde las instituciones la visibilización de estos colectivos”. Y concluye orgulloso de sentirse republicano recitando un buen pedazo del Cantares de Antonio Machado, invitando a los nuevos diputados a ser caminantes –nada que ver con los de The Walking Dead– para hacer camino al andar estos cuatro años.

Continúa la portavoz del PP, María Luisa Ceballos, rescatando para que lo ponga en práctica la Corporación “algo que se decía en la época de Augusto”. “Con la concordia crecen los proyectos pequeños, con la discordia los más grandes se destruyen. Traducido al orgullo provincial: “Vamos a tender nuestra mano para fomentar esa concordia, el consenso para conseguir grandes propósitos, por el bien de los cordobeses y de esta maravillosa provincia”, dice.

Es el momento del portavoz del PSOE, Esteban Morales. No iba a ser menos y comienza con algo que dijo “un pensador que vivió a caballo entre el siglo XIX y el pasado, Cyril Joad; que casi todos nosotros sabemos muy bien que nuestra tarea es dejar el mundo mejor de cómo lo encontramos”. Recordando, orgulloso, que eso fue lo que hicieron “los 300 hombres y mujeres de toda la provincia que se han sentado en estos mismos escaños” durante los 40 años que acaban de cumplirse de ayuntamientos democráticos. Todo ello con recuerdo especial para dos históricos diputados que se acaban de jubilar, Salvador Blanco (PSOE) y Luis Martín (PP) y destacando los logros de los expresidentes de la Diputación de la democracia.

Le toca cerrar al recién reelegido presidente. Antonio Ruiz recuerda una frase de Séneca: “No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos a hacerlas”. Traducido al día del orgullo provincial: “Cuando hace cuatro años tomé posesión como presidente de esta institución anuncié que iba a ser un mandato intenso y apasionante...nos hemos atrevido a hacer las cosas aunque fueran difíciles. Tras citar también a “nuestro paisano Maimónides” y adelantar que la columna vertebral de su mandato será luchar contra el despoblamiento, llega el culmen del orgullo provincial: “Hoy es el día del Orgullo...Somos la tierra de la tolerancia, la interculturalidad. Nuestros valores son universales y eso es a lo que nos comprometemos desde el Gobierno de la Diputación, a trabajar con esos valores sin descanso durante los próximos cuatro años por todos y cada uno de los 77 municipios que conforman nuestra tierra”.