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La Denominación de Origen Miel de Sierra Morena, que implica a la provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla y Huelva, se encuentra en su paso final para remitir la documentación necesaria a la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía. Según informó Francisco Garrido, secretario provincial de la organización UAGA-COAG, que viene trabajando desde hace más de tres años por la consecución de este sello de calidad, por parte de esta asociación agraria se ha hecho toda la recogida de muestras de los montes donde estaban las colmenas y se entregó a la Universidad de Córdoba, quien también trabaja por este proyecto. Así, el departamento de Bromatología de la UCO también ha llevado a cabo todos los análisis sensoriales y químicos de la miel y ha realizado su memoria al respecto, así como sobre la información geográfica de la zona que abarcará.
Toda esa memoria realizada por la Universidad está ahora en la Diputación, quien debe redactar la memoria resumen y remitir todo el expediente a la Consejería de Agricultura, quien finalmente decidirá la aprobación de esta Denominación de Origen.
El proyecto fue impulsado por la institución provincial cordobesa y a la iniciativa se adhirieron las de Jaén, Sevilla y Huelva, así como la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Universidad de Córdoba. Las mieles que se incluirán en la DO son milflores, las de azahar, romero, eucalipto, madroño, cantueso, brezo y castaño. De hecho el principal reto de los productores de miel andaluces para 2008 es conseguir la Denominación de Origen Miel de Sierra Morena, considerada vital "para dar un valor añadido a este producto que lo diferencie y revalorice frente al resto de producciones", según apuntaron desde la organización agraria COAG. Desde el sindicato agrario ya señalaron que 2007 que fue un buen año en cuanto a la producción, en el que se recuperaron unos niveles normales después de varios años con malos resultados.
No obstante, los precios siguieron registrando índices muy bajos, según la organización agraria, que recuerda que entre las cuestiones negativas se mantienen las importaciones de miel de terceros países que amenazan a los productores andaluces y la incidencia del síndrome de despoblamiento de colmenas. Este hecho fue uno de los principales puntos de debate en la principal feria del sector Expomiel, celebrada en Córdoba en noviembre de 2007, que analizó el síndrome de despoblamiento de las colmenas como una de las patologías que afectan a las abejas, así como la bajada del precio de la miel. El descenso en los precios es consecuencia de la entrada en el mercado español de productos de terceros países no comunitarios como China o Argentina, según se han quejado los productores.
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