La autovía A-318 de Lucena a Cabra soportará 13.000 vehículos diarios

La tediosa carretera A-318 entre Cabra y Lucena ha dejado ya de ser un tortuoso camino para los miles de conductores que circulan por esta zona de la Subbética. Desde ayer, la Autovía del Olivar en el tramo que va entre las dos ciudades ha resuelto un problema de tráfico ya histórico, puesto que el nuevo desdoble podrá asumir los más de 13.000 vehículos diarios que utilizan este itinerario. El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, fue el encargado de presidir un acto en el que se dejó constancia de la importancia de esta infraestructura, que atraviesa el interior andaluz y que tiene en el Lucena-Cabra el primer tramo que se pone en servicio en la provincia de Córdoba.

Griñán indicó que esta autovía "es fundamental no sólo desde el punto de vista de las comunicaciones internas", sino también para "el desenvolvimiento económico" del interior andaluz. El presidente andaluz mostró de nuevo su apuesta por las poblaciones medias del centro de la comunidad, que son las que más se benefician de la Autovía del Olivar. En este sentido, se refirió a la importancia de esta infraestructura para garantizar "el sistema productivo local" de este grupo de ciudades medias, como son, en el caso de Córdoba, Cabra, Lucena o Puente Genil.

El presidente de la Junta aprovechó su comparencia para reiterar que todos los tramos de la Autovía del Olivar a su paso por suelo cordobés están "en movimiento" y anunció que el próximo en iniciarse será el que va desde Lucena a Puente Genil. José Antonio Griñán explicó que las obras se licitarán en el primer trimestre de 2010. En principio, se trata de un tramo que parte precisamente en el final del que se inauguró ayer -a la altura del cruce de la A-318 con la Autovía de Málaga (A-45)-, que tendrá una longitud de 12,5 kilómetros y cuyo coste rondará los 70 millones.

Respecto al tramo Lucena-Cabra, los técnicos de la Delegación de Obras Públicas y responsables de esta obra dieron a conocer una avalancha de datos sobre la misma, como que su coste ha superados los 26,5 millones de euros, que comienza en el enlace con la A-45 a su paso por Lucena y finaliza en el enlace de acceso a Cabra, donde existe un ramal por la A-339 en dirección a Priego y Carcabuey, y que cuenta con dos calzadas, una para cada sentido, compuesta por dos carriles de 3,5 metros, arcenes exteriores de 2,5 metros e interiores de un metro y bermas de un metro, mientras que las calzadas se separan por una mediana de cinco metros.

Esta obra, que ha generado 463 puestos de trabajo, de los que 268 son directos y 195 indirectos, dispone de diez estructura, un viaducto de 174 metros en el enlace Oeste de Lucena y otro de 84 metros sobre el Arroyo de Rigüelo, cuatro pasos interiores y cuatro pasos superiores, algunos de ellos de gran vistosidad, como el que sobrevuela el puente de Córdoba.

De momento, la única actuación pendiente en el tramo abierto ayer al tráfico es el desarrollo del proyecto de restauración paisajística, que no se ha podido llevar a cabo todavía por motivos meteorológicos, pero que se ejecutará en los meses de otoño, con un presupuesto de 407.000 euros. Para ello se prevé la hidrosiembra y plantación de especies autóctonas con las que se recrea el paisaje y las formas existentes en el entorno. La plantación de estas especies vegetales en los taludes de la carretera proporcionarán una correcta protección del suelo frente a la erosión.

Además de los técnicos y del presidente, también respondió al preguntas la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar Rivero, quien señaló que en este mes de julio se reunirá con la alcaldesa de Doña Mencía -María de los Santos Córdoba- y con representantes de la plataforma ciudadana creada en este municipio que pide el soterramiento de la Autovía del Olivar a su paso por la localidad. En este sentido, Aguilar Rivero incidió en que se buscará el consenso entre las partes para que el trazado satisfaga tanto a los vecinos como a la Administración, si bien pidió cautela a la hora de usar determinados vocablos, como el de soterramiento. No obstante, la plataforma ciudadana entregó a la responsable autonómica un escrito en el que valoran los gestos realizados hasta ahora tanto por Obras Públicas como por el Parlamento andaluz en los últimos días.

Tras los actos protocolarios, los operarios de la empresa constructora comenzaron a retirar los últimos utensilios utilizados en las obras de ejecución del tramo Lucena-Cabra, a la espera de que la Guardia Civil de Tráfico autorizara la apertura al tráfico del tramo.