Vía Augusta
Alberto Grimaldi
La conversión de Pedro
Más que la moto un jipi. Así escrito, sin la preposición de que anuncie correctamente el complemento del nombre y con un puntito de desesperación, ya acostumbrado a la fatalidad, que hace que, lástima, vengan días y, solo quizá, vengan ollas.
Quemados, sí, como se ha pasado el agosto infernal que ayer abandonamos, con las tierras de medio país ardiendo, con estos fuegos nuevos, convectivos, que suman -con el viento y la altísima temperatura- un problema distinto a los que ya se conocían: que el bosque y el campo no se trabaja antes; que los que saben de sus tierras, los ganaderos y las gentes de campo, ya difícilmente los pueden cuidar con carácter preventivo, porque una burocracia inútil, ineficiente e ineficaz, ha sustituido a la práctica, sabia y contrastada experiencia de algo tan simple como permitir pastorear al ganado en el campo y en el monte.
Quemados, insisto, por comprobar cómo uno de los mejores inventos de nuestra convivencia, las autonomías, se están convirtiendo en antipáticas, con tanto patán infumable al mando, tanta invocación de competencia de unos y otros, y tan poca responsabilidad por la incumbencia. Quemados, aunque agradecidos, porque Europa ayude, y abochornados porque no pueda hacerlo más al no tener presupuesto desde el último aprobado en 2022 para 2023.
Quemados, porque los principales partidos, el de Gobierno, que no sorprende por malo, y el de la oposición, que se pierde en un baño sin ducha, sean tan inconsistentes. Han regalado, con su penosa pelea (echarse culpas y reprocharse vacaciones), un botín de crédito a Vox (de incierto, pero preocupante, valor, porque se le da al mismo tío que propone hundir barcos, entre otras lindezas burras y catetas).
Quemados, porque dan ganas de no volver a la misma rutina cansina y cutre de un país fantástico, con una gente recia y de valor, sometidos a tanto caro idiota incapaz.
Muchos incendios se empiezan a apagar con fuego técnico: prender algo que circunda, para que el fuego gordo no encuentre más combustible. Igual así.
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