Marcel Ophüls, el hijo de Max

Con 24 años era director del Burgtheater de Viena, con 27 empezó a trabajar en cine en Berlín y con 31 rodó su primera obra maestra. El problema es que era judío y que esta película, Amoríos, se estrenó en 1933. Con su esposa, la actriz Hilde Wall, y su hijo de seis años, Marcel, huyó a París. En 1940, al caer Francia, tuvo que volver a huir, esta vez a Estados Unidos, donde vivió años muy difíciles hasta poder volver a dirigir en 1947. En su paso por Hollywood dejó cuatro grandes películas, entre ellas Carta a una desconocida. Regresó a Francia en 1950, alcanzando la cumbre de su carrera con La ronda, El placer, Madame de… y Lola Montes. Murió en 1957. Era el genial Max Ophüls.

Cuando murió, Marcel, aquel niño que desde los seis años había vivido las penalidades familiares huyendo los nazis, tenía 30 años y se ganaba la vida como ayudante de dirección. Debutó como director en 1962 firmando junto a los ya consagrados Wajda o Truffaut uno de los episodios de El amor a los 20 años. Sorprende que debutara junto a ellos, pero es que era el hijo de Max, uno de los maestros más admirados por los jóvenes directores del nuevo cine. Marcel defendió toda su vida el legado de su padre a la vez que ironizó sobre su peso: “Mi problema es que soy el hijo de un genio”, escribió en su autobiografía que tituló Memorias de un hijo de papá.

Descubrió su vocación como documentalista con Munich o la paz para nuestro tiempo (1967), una producción de la televisión pública francesa. Su calidad le valió el encargo de otro documental sobre la Francia ocupada y la resistencia. El proyecto no cuajó, pero Marcel logró financiación de las televisiones alemana y suiza. Así nació esa obra maestra fundamental para la historia del cine documental –fue la inspiración de Claude Lanzmann para Shoah– que cambió la percepción francesa sobre su propia historia, provocando un terremoto político e ideológico. Esa obra maestra es Le chagrín et la pitié(La tristeza y la piedad, 1969). Su director, aquel niño que creció entre huidas y exilios, Marcel Ophüls, autor de otros grandes documentales histórico-políticos sobre Vietnam, los juicios de Nuremberg, Klaus Barbie o la caída del muro, ganador de un Oscar en 1989, ha muerto a los 97 años. El hijo del genio era un genio.