Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Ultramar
Punto de vista
Juan Espadas, alcalde de Sevilla y candidato del PSOE para presidir la Junta de Andalucía y que goza de la estima del presidente del Gobierno y del PSOE, Pedro Sánchez, parece que ha hecho uso de ese dicho castellano que pongo de titular, porque después de anunciar que no aprobaría los Presupuestos para 2022, presentados por el PP, ahora dice que los votaría si las cuentas vuelven a la Cámara incluyendo las medidas propuestas por el PSOE. Tampoco a Vox le parece bien estos Presupuestos, aunque los de la Comunidad de Madrid sí que los apoyará con el voto de sus 13 diputados. Pero aquí en Andalucía, como el PSOE, también Vox votó en contra de los Presupuestos presentados y, después de negar que existiera una pinza por parte de la oposición, reclama que se convoquen cuanto antes elecciones. No se han compadecido por el lamento de la consejera de Igualdad al advertir de que se pierden así 300 millones de euros, que se invertirían en dependencia.
El PSOE se plantó en el último tramo de la negociación aduciendo que Andalucía lo que necesita son Presupuestos y no elecciones, en lo que todos, gobierno y oposición, están conformes. Ya se habían aceptado seis de las diez propuestas de los socialistas, pero rompió las conversaciones, e ignoró las últimas llamadas al diálogo que se le hicieron.
La actitud negativa de Espadas algunos la atribuyen al consejo o indicación de Pedro Sánchez, que contrasta cuando éste no ha tenido reparo alguno en sacar adelante los Presupuestos del Estado con el apoyo de Bildu. Aquí, no podría criticar el apoyo -que no se ha producido- de Vox a los Presupuestos presentados. Los críticos de Espadas ven que tiene una sumisión exagerada al Gobierno de Madrid. La oferta de Espadas, aunque pudiera interesar el consejero de Hacienda de la Junta, que tanto se ha esforzado en la confección de los Presupuestos, se produce fuera del tiempo hábil porque, según la ley de la Hacienda Pública de Andalucía, si esta aprobación no se produce antes de primer día del ejercicio económico, se considera automáticamente prorrogado el del ejercicio anterior. Las modificaciones que habría que hacer, si se aceptara la oferta de Espadas, son muy complejas y necesitan de expediente justificativo de esa necesidad y tendría que hacerse por medio de un decreto ley, que también necesita apoyos para prosperar. Dicen que Espadas rechaza los Presupuestos presentados por razones tácticas, porque ha dicho que tener Presupuestos aprobados supone estabilidad y no quiere que se vea así. Por tanto, la conclusión es que tendremos elecciones el verano que viene, mejor en junio que en octubre.
También te puede interesar
Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Ultramar
Cambio de sentido
Carmen Camacho
¿Bailas?
Su propio afán
Enrique García-Máiquez
Tarde de toros
Gafas de cerca
Tacho Rufino
La tasa single
Lo último