La psicóloga Pilar Varela estudia en un ensayo los mecanismos y los efectos de la timidez

La experta ofrece claves para recuperar la seguridad propia y perder el miedo a los demás

Efe / Córdoba

25 de febrero 2008 - 05:00

Una persona con una timidez "severa" puede ser un amante "fantástico" aunque "se le hacen muy cuesta arriba" algunas maniobras previas a la relación de pareja, como el cortejo o acceder a una persona de la que está enamorado, según afirma la psicóloga Pilar Varela, que ayer presentó en Córdoba su libro Tímida-mente.

Varela recoge en su obra pautas y consejos para combatir la timidez en el trabajo, a la hora de hablar en público y también en el amor. El tímido, afirma, utiliza el humor o el carácter arisco como si fuesen "técnicas y barreras de protección" para que la gente "se acerque menos a él".

Por otro lado, la timidez presenta una conjunto de "encantos", según Varela, como "saber escuchar bien, ser sonrientes o discretos". No obstante, la experta reconoce: "Yo preferiría que mi hijo no fuese tímido", porque esas características antes citadas son "unas ventajas relativas".

Para Varela, la timidez en los adultos "es más invisible" porque "la esconden, ya que no está bien vista en la sociedad". La psicóloga explicado que las fobias sociales "normalmente tienen sus raíces en la infancia", pero también se pueden sufrir en edades más tardías "por motivos como el divorcio o el paro, que afectan a nuestro andamiaje emocional".

En general, señala que el libro ofrece las claves para "recuperar la seguridad en uno mismo y perder el miedo a los demás" y critica la creencia de que la timidez es "un problema menor e inocuo que se ignora, como si se tratase de ser rubio o moreno".

No obstante, destaca que la timidez no es un impedimento para alcanzar el éxito profesional.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

El extranjero | Crítica

Ozon no puede con Camus

Lo último