Mientras España cosía una estrella de oro sobre el escudo de la camiseta, la Córdoba moderna se partía la camisa por las noches en los garitos del Vial Norte, entonces conocido como "el paseo marítimo" por la mezcla de su amplitud peatonal, la gente que salía a correr y la aglomeración de pubs a su alrededor. Era una zona en auge, que proyectaba una imagen cosmopolita para una ciudad "abrumada por un pasado glorioso", contaba Carmen Pérez en una crónica para El País. Se trasladaron las oficinas y los ejecutivos, crecieron hoteles y edificios con piscina, aparecieron los runners y el tardeo, consolidado como el lugar de moda del fin de semana para el abanico de edad que comprendía de los 25 hasta los 40 años: "Era la milla de oro", recuerda la escritora María José Moreno (Córdoba, 1958), que sobre ese escenario empezaba a escribir la primera novela de su Trilogía del Mal: La caricia de Tánatos.

Más de una década después y junto a una legión de otras 20 personas (aforo completo), Moreno ha revivido en la primera cita de Paseos por la Córdoba Negra, durante la segunda jornada de Cordoblack, cómo era esa Córdoba que le sirvió de inspiración como terreno literario para narrar las aventuras de la psicóloga Mercedes Lozano.

"Aposté por Córdoba como escenario porque soy cordobesa, era la primera novela que yo escribía y me quería mover en un ambiente que yo conociera", reconoce María José Moreno. "Concretamente esta zona [Vial Norte], porque cuando yo lo escribí en 2010 estaba en mucho apogeo, aunque es verdad que ahora ha decaído un poco, pero esto era la milla de oro y como mi novela era moderna y la protagonista era una psicóloga moderna..., no podía ponerla por la Mezquita, aunque hubiera sido más bonito. Por eso escogí esta zona, porque pensé que era por donde una persona moderna se podía mover. Entonces estaban los bares más famosos, que estaban de moda, como el MOMA", uno de los lugares que aparece en el libro.

La autora María José Moreno durante el paseo literario.

"Eso es lo que quería mostrar, más que lo clásico, porque mi novela no tiene nada de clasicismo, y fuera de lo que a veces se suele enseñar, que son los lugares más significativos de la ciudad", defiende la autora.

En la Trilogia del Mal que componen La caricia de Tánatos, El poder de la sombra y La fuerza de Eros, es habitual leer cómo Mercedes Lozano frecuenta el Vial Norte para salir a correr o en su rutina diaria de la casa a la consulta. "Tampoco quiero hacer spoiler", bromea María José Moreno, ya que la mayoría de los asistentes no han leído toda la saga, aunque estos encuentros a pie de la escena generan interés. "Después de esto, creo que me lo voy a empezar", afirma Malu, una de las asistentes.

La ruta avanza aprovechando la sombra por los soportales en la acera de la Avenida de la Libertad, camino de la Estación de Renfe. Primera parada: sala Hangar. "Esto, hace unos años era el MOMA", señaliza la autora. 

Los semáforos y el calor van disgregando al pelotón. Hay gente del público que viene desde Cantabria y Salvador Gutiérrez Solís -uno de los artífices de Cordoblack- se une enfrente del Hotel Center: el balance del festival es "muy bueno" tras la primera jornada. El grupo se reúne de nuevo en los Jardines de la Agricultura (Los Patos), detrás de la biblioteca que aún está por abrir. "Aquí estaban los rosales, al estilo jardín francés", refresca la memoria María José Moreno desplegando una foto y un plano que lleva impresos. Esta ubicación también aparece en la trilogía, en el segundo tomo, y bajo la sombra se detiene a leer algunos fragmentos de la novela en la que se nombran todas las ubicaciones de Córdoba. 

Paseos por la Córdoba Negra en los jardines de la Agricultura.

La tercera localización, con la que acaba la ruta, se sitúa a escasos metros, junto a la Casa de Manolete, hoy un restaurante. "La familia de la protagonista vive en un chalet, al lado del palacete", cuenta la escritora, antes de terminar el encuentro. 

Paseos por la Córdoba Negra

La actividad Paseos por la Córdoba Negra se diseñó con el objetivo de recorrer algunos de los lugares concretos que han inspirado a los autores cordobeses en sus novelas de género negro y de potenciar la imagen de Córdoba como “espacio literario”.

"Cuando me lo propuso Salvador Gutiérrez Solís le dije de momento que sí", afirma Moreno, dispuesta a hablar de la novela y a que "surja el diálogo" con los lectores. Las rutas literarias se han convertido en un formato parecido a las visitas guiadas, está en alza, y los autores lo reconocen como algo "más emocionante" al permitirles entrar "en contacto directo" con el lector. "No es lo mismo que una presentación, esto es un poco a la aventura", cuenta la escritora cordobesa.

Tras cancelar la primera sesión con José Sánchez Vázquez por motivos ajenos a la organización, la programación contempla dos paseos más a cargo de los autores cordobeses Félix Ángel Moreno Ruiz (sábado 4, 11:30) y Francisco José Jurado (domingo 5, 11:30), en ambos completo ya el aforo.