Madrugón inaugural para ser las primeras en entrar a los Patios de Córdoba
Mayo Festivo
En la era del granturismo, el Alcázar Viejo es un barrio de primera. Acostumbrado a resistir en mayo, como el Real Madrid en la Champions
Las imágenes del primer día de Patios
Guía completa: Rutas, horarios y todo lo que debes saber
Miles de personas han vuelto a acudir a la llamada del Festival de Los Patios de Córdoba en el día inaugural de su nueva edición. Extranjeros, jubilados... y, esta vez, también muchísimos madrileños que tenían festivo este 2 de mayo. Los 52 Patios de concurso y otra decena fuera de concurso se convierten hasta el 12 de mayo en el principal escaparate de una ciudad que durante todo el año mima estos jardines interiores, verdaderos tesoros arquitectónicos y antropológicos que cuentan con el sello de Patrimonio Mundial, en la categoría de bien intangible, por parte de la Unesco.
Una madre y su hija cuentan a El Día que se levantaron a las 04:00, fueron a la Estación de Atocha, cogieron el primer tren hasta Córdoba, hicieron el check-in en el hotel y estaban en la cola a las 10:00 en Martín de Roa (San Basilio), una hora antes de que abrieran las puertas, para ser de las primeras en entrar a uno de los patios que más paciencia hay que echarle. "Es la tercera vez que venimos: vamos haciendo cada año una ruta diferente".
Otro grupo de mujeres de Pola de Lena (Asturias) han inaugurado las visitas de este año a San Basilio, 17, el más antiguo de los que participan en el concurso (desde 1948). También llevaban ellas desde las 10:00 al frente de la cola. Cuando aún no había cola. Era la primera vez que entraban a un patio cordobés. "Allí en Asturias también hay patios, pero asturianos", diferenciaban. Concretamente este de San Basilio, 17 es uno de esos nueve patios "singulares" porque su estilo mezcla el estilo castellano-manchego con el típico cordobés, les explicaba el cuidador Juan Bautista Onetti, señalando la balconada de madera.
Otro matrimonio de Valladolid que se ha dado el madrugón para entrar en el primer turno, y que reconocía haber venido expresamente para ver los Patios, preguntaba a Onetti por el pavimento: "El chino cordobés es el protagonista cuando llega el verano, más protagonista incluso que las plantas. Se riega con generosidad, se echa el toldo, se pulverizan las plantas y formamos una especie de microclima consiguiendo una bajada de temperaturas considerable: de seis a ocho grados menos", respondía.
Juan Bautista Onetti afirmaba no tener nervios en este primer día de visitas. Tomó el cometido de cuidador hace ocho años y ahora "las plantas me tienen atrapado", asegura.
Su vecino Ángel Araujo, en San Basilio, 15, lleva 12 años presentando el patio de su casa al concurso. Allí se esconde uno de los rincones con más solera y que más fotografías se lleva. Es una salita al fondo del patio decorada con carteles y almohadillas; con la típica mesa, las sillas de esparto y la jarra de vino que evocan otra vida, casi extinta seguramente, en la que se hablaba de toros en los patio cordobeses.
Ni media hora después de que hubieran abierto las puertas los Patios, todavía con los camiones de reparto subidos a las aceras, la calle San Basilio estaba ya en ese punto intransitable. Una imagen mil veces descrita, de tantas maneras como crónicas de Patios existan ("las filas de un patio y otro cruzadas", "enroscadas", "interminables"...), para intentar reflejar la catarsis de indignación, cansancio, chistes, gritos, hambre, calor..., que despiertan las colas y aglomeraciones.
A pesar de todo, en la era del granturismo, el Alcázar Viejo es un barrio de primera. Acostumbrado a resistir en mayo, como el Real Madrid en la Champions. Menos de 24 horas antes estaban desmontando un primer premio de la Cruces, con esa doble cara de Antonio Gala y Julio Romero de Torres, y por la mañana volviendo a soportar el peso del espectáculo dentro de sus muros.
El palacio popular de las flores
En ese pulso compite también Santa Marina: el otro gran reclamo. Marroquíes, 6 es el palacio popular de las flores, el recinto más premiado de la última década en la categoría de arquitectura antigua. Un mini barrio distribuido en siete callejones laberínticos con una amplia variedad floral y en los que están repartidas las viviendas de los vecinos y distintos talleres de artesanía.
Este trozo de la Córdoba más clásica de principios del siglo XX, en el que llegaron a convivir hasta 23 familias, se mantiene ahora por ellos, donde siguen compartiendo esa forma de vivir en comunidad, con dependencias comunes y puertas abiertas, aunque en estos días de concurso no se muestre esa esencia al cien por cien como el resto del año. "No se sacan los tendederos", pone de ejemplo Ángela, una de las cuidadoras y responsables del taller de cerámica desde muchos años.
Ángela señalaba en este día inaugural una de las espectaculares buganvillas que se pueden ver al entrar y, como novedad, un bonsái. Las lluvias de abril han venido bien a las flores, aseguraba, aunque otros cuidadores como Á. Araujo (San Basilio, 15) respondía todo lo contrario, que "sí han mermado, especialmente las lluvias de la última semana" por el daño provocado a las flores más débiles.
La expectación en Marroquíes, 6 también era grande en este primer día inaugural. "Colas impresionantes, desde primera hora", apuntaba la controladora en la puerta. A las 12:00, en tan solo una hora, el contador registraba ya 330 personas, aunque la dimensión permite un aforo de 60 personas simultáneamente.
Por su parte, en Maese Luis, 9, conocido como "el patio de las tortugas" o "el patio de la Kensia", dentro de la ruta Judería-San Francisco se rebasaban las 150 visitas un poco antes del mediodía. La propietaria de la vivienda y cuidadora, Isabel López, lleva con éste 30 años de participación en el concurso. "Las plantas son mi vicio", declaraba para la edición de la XX Guía de Patios de El Día de Córdoba. Este año, sin embargo, se han llevado las tortugas porque, "una de ellas se escapó".
Como nota reseñable de esta primera fecha, y así lo anotaban todos los turistas, controladores y cuidadores, ha sido, desde luego, el tiempo. "Los otros años que hemos venido hacía mucho calor", comparaban la madre e hija de Madrid entrevistadas. Ángela, desde Marroquíes, 6 apuntaba en esta línea que es un clima "estupendo" para estar de ruta por los patios, también comparando con ediciones anteriores.
En este sentido, no hay una preocupación porque el tiempo pueda chafar la semana de Patios, aunque la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ya ha informado de que el frío se aleja y llega, de nuevo el calor a Córdoba en los próximos días en los que se llegarán a superar a los 30 grados. No en vano, será a partir de este 3 de mayo cuando el mercurio comience a escalar posiciones de manera paulatina. Para el que va a ser el primer sábado de Patios, la máxima prevista es de 27 grados, la misma que se alcanzará el domingo, descartando la probabilidad de que se registren lluvias.
Esta jornada inaugural, también supuso el estreno en Los Patios de Maribot, un robot interactivo que ofrece información sobre las diferentes rutas del Concurso de Patios de Córdoba en esta edición, y que se ubica en el Alcázar Viejo, a modo de experiencia piloto. Entre sus funciones también incluye la descripción de localizaciones y el tiempo estimado en llegar a otras rutas desde la de San Basilio.
El Patio del Ejército
La subdelegación de Defensa de Córdoba se ha sumado a este día inaugural presentando un año más su "humilde aportación a una fiesta tan importante", como ha definido el coronel Ortega, que celebraba este acto en el cargo de subdelegado por primera vez. El patio, fuera de concurso, estará abierto de 11:00 a 14:00.
Durante el acto, el coronel Ortega ha querido ofrecer a todos los invitados una detallada explicación sobre la historia del edificio donde se sitúa la subdelegación de Defensa y los motivos por los que se han conservado rasgos típicos como el patio cordobés, que aunque de otra manera sigue cumpliendo esa función de convivencia diaria.
En este sentido, ha destacado los arcos, el chino cordobés y las celosías como elementos más característicos del patio, además de las plantas y flores que impregnan de olores y colores a la subdelegación. Como colofón, el dúo de trompeta y guitarra formado por Alberto Lucena y Manolo Roldán ha interpretado el Soy Cordobés y el Himno de España para deleite de los asistentes.
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