Si antes del lunes el Tribunal Constitucional no ha decidido sobre la consulta de Ibarretxe y, como todo parece indicar, se mantiene su prohibición, el Gobierno vasco asume que la consulta "no se va a producir el 25 de octubre", tal y como estaba programado. Así lo reconoció hoy la portavoz del Ejecutivo vasco, Miren Azkarate, que insistió que si no hay una decisión antes del día 15, fecha límite fijada en la Ley de Consulta para su convocatoria, entenderán el silencio como "un pronunciamiento negativo" del Constitucional y seguirán adelante con sus planes, es decir, denunciar a España ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.

"Lo peor que puede hacer el Tribunal Constitucional es dejar que sea el tiempo y no el Derecho el que tenga la última palabra al respecto", afirmó Azkarate, que recordó ya han dicho "por activa y por pasiva" que si el 15 de septiembre la aplicación de la Ley de Consulta "sigue suspendida" la ausencia de pronunciamiento de los jueces equivaldría a "no poder consultar la consulta, y es una Ley que está pensada para esta consulta". 

"Por eso, decía el lehendakari que el Tribunal Constitucional tendría que pronunciarse antes del día 15 o, alternativamente, levantar la suspensión, que por cierto, ha sido decidida por una sola persona, el presidente del Gobierno español", espetó Azkarate, que aseguró que el lehendakari no ha desistido de denunciar al Estado español personalmente en Europa y recordó que Ibarretxe ya dijo que su Gabinete, "como Gobierno, no está legitimado" para hacerlo, pero sí sus integrantes, como ciudadanos" sí que pueden sumándose a las iniciativas articuladas por los partidos.

En todo caso, la portavoz del Gobierno vasco negó que ir a Estrasburgo antes de que se haga público el fallo del Constitucional supone "tirar la toalla" y asumir la ilegalidad de la consulta. Además, dijo desconocer si las denuncias ante Estrasburgo se admitirán o no a trámite, pero recordó que "también el Gobierno español apostaba porque no se iban a admitir a trámite los recursos contra la Ley de Partidos y sí se admitieron a trámite". "Por tanto, eso habrá que verlo", sentenció.

Y mientras el Gobierno de Ibarretxe sigue inflexible en su defensa de la consulta y listo para llevarla a Estrasburgo, desde el PSE critican el "esperpento" que supone el desdoblamiento del lehendakari Ibarretxe y el ciudadano vasco Juan José. En una rueda de prensa celebrada en el Parlamento de Vitoria, el portavoz de los socialistas, José Antonio Pastor, se refirió al "desdoblamiento de personalidad" que se producirá si finalmente el tripartito denuncia ante Estrasburgo la prohibición de la consulta, una "ocurrencia" en virtud de la que "el ciudadano Juan José Ibarretxe denuncia al lehendakari del mismo nombre" por su condición de representante del Estado en Euskadi.

Desde San Sebastián, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, optó por un símil bíblico para definir la deriva de Ibarretxe y señaló que el lehendakari va por el mundo "en plan Moisés, queriendo llevar al pueblo vasco a la salvación", pero lo único que hace es "llevarlos al precipicio". El dirigente popular pidió a Ibarretxe que baje "del monte" y ponga un poco de "sentido común, racionalidad y moderación" para pasar a preocuparse de los problemas que verdaderamente interesan a los ciudadanos.