Josan González ha sido el elegido por la directiva del Córdoba Futsal para dar un cambio radical al equipo blanquiverde. El técnico de Puente Genil tiene la complicada misión de dar un giro importante a la trayectoria del conjunto cordobés, con el objetivo de atar la permanencia en su primer año en Primera División.

Hasta la fecha, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad no ha entrado en descenso en las 23 jornadas que se llevan disputadas de campeonato. Pero la renta con la que contaba semanas atrás se ha esfumado. La distancia con el descenso es tan solo de dos puntos, por lo que el margen de error ya no existe.

El cuadro blanquiverde se encuentra inmerso en una pelea cuerpo a cuerpo junto al Burela, colista con 13 puntos, y el Zaragoza, penúltimo con 15. Los 17 puntos que atesora en su casillero el conjunto cordobesista le dan por ahora un mínimo respiro, pero las siete finales que quedan por delante se presentan como una evaluacíon continua hacia el objetivo de la salvación.

En esos apenas dos meses de competición, Josan González tiene por delante una tarea complicada y que tendrá que aplicar de modo inmediato. En ello anda ya el pontanés, que afronta cinco retos clave en el camino hacia la permanencia en la élite.

Recuperar la moral de los jugadores

La primera tarea de Josan al frente del Córdoba Futsal es quizás la más importante. Por eso el técnico hizo hincapié en ella nada más llegar, cuando reafirmó su confianza en cada uno de los jugadores que tiene en nómina el club. El aspecto psicológico será vital en este tramo final de la temporada, para un equipo al que le pesan los malos resultados encadenados y las nueves jornadas que acarrea sin conseguir una victoria.

En esa labor de recuperación mental, la simple agitación que supone la llegada de un nuevo entrenador ya debe suponer que muchos jugadores den un paso al frente, por lo que se espera una mejor inmediata en ese aspecto. Sin duda, para conseguir el objetivo de la permanencia el primer paso es que todo el grupo crea en él sin fisuras.

Explotar el factor Vista Alegre

En los últimos cuatro partidos en casa, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad solo ha sumado tres empates y una derrota. En prácticamente todos los partidos ha competido de igual a igual al rival de turno, pero sin la efectividad que demostró en su pista en la primera vuelta, donde consiguió tres de las cuatro victorias que tiene en toda la liga.

Recuperar esa fortaleza en Vista Alegre será trascendental para la salvación. Sobre todo porque los de Josan González cuentan con la ventaja de jugar cuatro de sus siete últimos partidos ante su público. Ese factor, unido al ambiente que registra el pabellón cordobés en los momentos importantes, debe ser un valor determinante para que el equipo sume los puntos necesarios sin necesidad de buscar la machada lejos de su pista.

Mejorar en la faceta defensiva

El Córdoba Patrimonio de la Humanidad es el equipo más goleado de toda la Primera División, con 89 tantos en contra. Ni siquiera los dos conjuntos que se encuentran en descenso han encajado más que el equipo blanquiverde. Además, esa endeblez defensiva se ha visto agravada considerablemente en el último mes de competición. Tanto que en los últimos cuatro partidos han sido 18 los goles recibidos, con una alarmante media de 4,5 por encuentro.

Los blanquiverdes tienen en la defensa una de sus señas de identidad. De hecho, al principio de la temporada, fue ese el factor que permitió al conjunto cordobés sumar puntos ante rivales en teoría bastante superiores.

Mención aparte dentro del trabajo defensivo merece la estrategia. El Córdoba Futsal no ha sabido defenderla con solvencia en toda la temporada, pero en los últimos partido ese problema se ha agravado. Y como bien dije Josan González en su presentación, el equipo no puede fallar en las tareas que dependen de la concentración y la actitud. La defensa es una de ellas y tiene que mejorar de forma obligatoria.

Aumentar la producción ofensiva

Al problema defensivo, el Córdoba Patrimonio une su poca pegada en ataque. Bien es cierto que el gol es lo que más se paga y al equipo con el presupuesto más bajo de la categoría no se le pueden pedir milagros en ese sentido. Ahora bien, sí se puede dar un poco más.

Hasta la fecha, el Córdoba Futsal es el segundo equipo que menos goles hace, con 51. Solo los paupérrimos 40 goles del Burela empeoran ese dato. Y lo cierto es que el conjunto blanquiverde genera suficientes ocasiones de gol como para hacer muchas más veces diana.

Mejorar en la finalización y ganar calma en esas decisiones finales ante la portería rival puede ser un factor determinante a la hora de sumar algún punto extra que acerque el objetivo. 

Exprimir el talento de la plantilla

Quizás la última misión del técnico, aunque no por ello menos importante, sea la de elevar el rendimiento individual de ciertos jugadores dentro del plantel. En la planificación que el Córdoba Futsal hizo de la temporada, había nombres como los de Daniel Giasson, Cristian Cárdenas o el propio Shimizu, que llegó en el mercado invernal, llamados a ser piezas angulares en el equipo.

Por unos motivos u otros, lo cierto es que su rendimiento aún no ha sido el esperado, al igual que el de alguno de los hombres que ya estaban en la plantilla y de los que se espera un paso al frente. Josan González sabe que necesita mucho más de cada uno de sus jugadores y así lo hizo ver en su puesta de largo.

La mejora en el rendimiento individual servirá para elevar el nivel del equipo y estar mucho más cerca de conseguir esa ansiada permanencia.