El director del Gabinete de Presidencia del Real Valladolid, David Espinar, tras la polémica suscitada por el cambio del escudo del club, ha indicado a Efe que se mantendrá "puesto que obedece a un proceso de renovación de la imagen y de la marca que será beneficioso para la entidad, para seguir creciendo".

En este sentido, ha explicado que la modificación es el resultado de más de dos años de trabajo con Futurbrand y el área de negocio del club que se ha llevado a cabo "con buena fe y siempre pensando en los intereses del Real Valladolid" y que también se consultó con "aficionados y abonados".

Considera "comprensible y lógico" que haya "desazón" entre los seguidores blanquivioletas y "están en su derecho de sentirse mal y de mostrar su enfado", pero insiste en que "no obedece a ningún capricho" sino que es "fruto del trabajo de mucha gente, que ha tenido en cuenta todos los detalles a la hora de realizar el cambio".

Por este motivo, se ha decidido que el escudo contenga "las llamas, la corona -que le da el nombre de Real- y los colores", porque son los elementos que "siempre han formado parte del mismo", mientras que la laureada y los castillos "no han permanecido inamovibles en el tiempo".

Precisamente, el hecho de que se haya eliminado el símbolo de la laureada, que ha sido el que más debate ha suscitado entre aficionados y seguidores blanquivioletas, "en ningún sentido obedece a una cuestión política, ya que el Real Valladolid es apolítico y no ha sufrido ningún tipo de presión al respecto, por parte de las instituciones".

De ahí que considere que esta cuestión "está fuera de la polémica", si bien es cierto que algunas opiniones en redes sociales no han beneficiado al club, como la realizada por Izquierda Unida, expresando su alabanza a la supresión de un símbolo que consideran "franquista".

"Está claro que toda decisión tiene una contestación, tanto a favor como en contra, y nos han llegado también felicitaciones con respecto al cambio del escudo. No se ha realizado con un fin económico ni para hacer negocio, sino dentro del proceso de renovación de la marca y, por descontado, no responde a un tema político", ha insistido.

Al hilo de este aspecto ha resaltado el hecho de "tener que adaptarse a nuevos formatos digitales y de redes sociales", para lo cual es más apropiado un escudo más sencillo, es decir, que se han estudiado "diferentes ámbitos" para modificar el escudo y adaptarlo a una nueva realidad.

Si bien los seguidores han pedido, a través de las redes sociales, que nadie adquiera ningún producto con el nuevo escudo, lo cierto es que esta circunstancia "no va a influir en la decisión tomada" ya que consideran que, "a medio plazo" todo el mundo "podrá disfrutar" de él, y se verá de otra manera.

"Que el anterior escudo era muy bonito, nadie lo discute, y me alegré de que fuera elegido como el más bonito de España, pero fue una votación a través de una encuesta de twitter, sin ninguna base científica, y hay que amoldarse a los nuevos tiempos, que exigen cambios", ha añadido.

Eso sí, ha dejado claro que les "inquieta" la polémica surgida tras la decisión sobre el nuevo escudo: "porque no nos gusta que los aficionados tengan malestar" pero considera que "con el tiempo, se verá que es algo bueno y positivo para el Real Valladolid".

Por último, en lo que respecta a las cuestiones meramente deportivas, tras la aparición de nombres como los de Marcelo o Dani Alves o la negociación por la continuidad de Gonzalo Plata, ha advertido de que "la dirección deportiva está trabajando para que el equipo no sea un mero invitado en Primera, sino que sea protagonista".