Las primeras intenciones de Lucas Alcaraz

El primer partido de una pretemporada suele ser como un caldero lleno de ideas que estalla de repente. Por eso, generalmente, acaba pareciendo desigual en cuanto a imagen y rendimiento en casi todos los equipos. También lo fue para el Córdoba, que mostró dos rostros bien diferentes (uno bueno y otro regular) en las dos partes del choque del miércoles en Jaén (0-0). Eso sí, de lo poco o mucho que se pudo ver de fútbol en La Victoria, sí que se dilucidaron algunas de las pretensiones de Lucas Alcaraz con vistas a la próxima campaña.

En la portería actuó Raúl Navas. Para el gaditano tuvo que ser un alivio volver a pensar en fútbol después de unos días complicados. Alberto García no le sustituyó, por lo que es de suponer que será el catalán quien ocupe la puerta en el siguiente bolo, mañana en Badajoz.

Los cuatro de atrás dejaron sensaciones contradictorias. Primero jugaron los del año pasado (Gerardo-Gaspar-Agus-Fuentes), quienes exhibieron la compenetración que les hizo indiscutibles. Difícil lo van a tener David de Coz en el lateral diestro y Camille en el zurdo, puesto que Gerardo está pletórico y Alcaraz cree ciegamente en el joven Fuentes. Las dudas sobre Alberto Aguilar se disipan de momento: ha venido, salvo que haya algún refuerzo, para jugar de central. Su pareja de baile en el segundo tiempo fue Richy, que estuvo discreto.

En el centro del campo sorprendió que Beobide y no Usero fuera el más empleado por el técnico. El vasco lució desde la mesura, igual que -cuentan- solía hacer en el Real Unión. A su lado jugó primero Jorge Luque, que sigue manteniendo su peso específico en las acciones a balón parado y en la distribución, y luego el ya mentado Usero. La primera dupla estuvo más atinada que la segunda.

Los dos costados, de inicio, fueron para Pascual y Javi Flores, dos de la tierra. El de Fátima se mostró más incisivo, aunque, y esto es innato a su condición, tuvo tendencia a auxiliar por el centro al doble pivote. ¿Petición de Lucas en pos de darle mayor recorrido por la banda a Fuentes? Tras la reanudación, Arteaga y Dañobeitia tomaron su relevo. Ninguno de los dos lució, pero acaso Mikel se asoció un poco más con los hombres de ataque.

Unos delanteros que no tuvieron su noche. La dupla inicial Oriol Riera-Pepe Díaz se asoció como pudo, aunque parezca una unión (por aquello de contar con un delantero de referencia fuerte y otro más veloz) contra la naturaleza del fútbol de ataque de Alcaraz. Tal vez fuera la gran sorpresa del encuentro. Riera tuvo una grandísima oportunidad de gol.

En la segunda mitad, los dos de arriba fueron Charles y Dani Cabanillas. El brasileño es más hombre de banda y tiende a escorarse, mientras que al joven del filial se le vieron tan buenas maneras y tanto desparpajo que fue capaz de tirar una vaselina que se estrelló en el larguero. ¿Será él el Fuentes de la 2010-2011? Su irrupción supondría una gran noticia para un club necesitado de buenas nuevas. Sobre todo, en lo que a la parcela ofensiva -la que más preocupa- se refiere.