El Córdoba consiguió la segunda victoria del curso a domicilio en uno de sus partidos más completos en lo que va de temporada. Los blanquiverdes, que últimamente lejos de su estadio habían apostado por una férrea defensa y el aprovechamiento máximo de sus opciones en ataque, dieron ayer un paso adelante y se mostraron más ambiciosos y mejorados en el trato del balón.

De inicio, el conjunto de Oltra no varió su imagen respecto a las últimas comparecencias. Aunque defendía demasiado atrás, el equipo apenas sufrió hasta que se permitieron un par de centros laterales, suficientes para que Caballero adelantara al Lugo. Sin demasiado control de balón, el Córdoba igualó gracias a una genialidad de Markovic y al talento de Xisco para firmar el gol.

Pero el paso al frente del conjunto blanquiverde iba a llegar en la segunda mitad, cuando la indefinición del Lugo facilitó a los de Oltra hacerse con el control del balón y generar más fútbol de ataque. De una de esas conexiones entre líneas -donde Oltra pretende que su equipo tenga más el cuero, no en defensa- llegó el tanto de Pineda, justo premio al mayor protagonismo del Córdoba en ese tramo

Al final tocó defender con uñas y dientes, pues el trabajo ya estaba hecho. El premio fueron tres puntos de oro para seguir volando.