El VII Mundialito de la Fundación Cajasol, celebrado el pasado sábado en El Fontanar, fue un éxito, con el compañerismo y la convivencia como principales valores, dado que los resultados eran lo de menos. Con la participación de las escuelas Isidro Reguera, Útica Marmolejo, Antequera, Castro del Río, Parque Cruz Conde, Real Betis Balompié, Dani Triana Ar-Rabad y Campillos, unos 250 niños disfrutaron de un torneo para las categorías prebenjamín y benjamín.

La cita fue una fiesta repleta de emociones para deportistas, padres, familiares y público, que representan los valores de integración, igualdad, salud, juego limpio, solidaridad, trabajo en equipo y diversión. La jornada culminó con la entrega de medallas, camisetas y trofeos conmemorativos para todos los participantes, con independencia de los resultados y la clasificación final.

Además, la organización preparó actividades socioculturales como globoflexia, pintacaras o magia para entretener y crear armonía tanto en los participantes como sus acompañantes. Para finalizar el evento, Luis Miguel Pons, subdirector de Acción Social de la Fundación Cajasol, hizo entrega de un desfibrilador ZOLL semiautomático (DESA) a las escuelas de nueva participación, siguiendo el compromiso de la asociación con la cardioprotección de espacios deportivos.