"La confianza sólo la dan los resultados"

Relajado, una sonrisa en la boca... Hacía tiempo que a Pablo Villa no se le veía así. El técnico lo ha pasado muy mal y se lo notaba, por eso ayer se permitió un respiro ante los micrófonos, aunque sin perder nunca la perspectiva, porque "aquí da igual que el entrenador caiga simpático o no. La confianza o la desconfianza en el entenador la otorgan los resultados". "La opinión de todo el mundo es respetable", dijo agradeciendo el apoyo de parte de la grada durante varios pasajes del encuentro, "pero los que mandan son los resultados. Es algo que tengo claro desde que me saqué el título de entrenador".

"Ha sido una victoria sufrida, porque no es fácil para los futbolistas después de tres derrotas seguidas, y sobre todo cómo se produjeron las dos últimas", dijo el madrileño, quien espera que este triunfo sirva "para traer la mayor tranquilidad y normalidad posible para poder preparar las semanas de una manera natural".

El técnico no negó que ha pasado semanas difíciles, "pero a mí me gusta estar en tensión, me ayuda a crecer". "Los momentos de dificultad son los más bonitos para un entrenador para ver cómo los gestionar", llegó a decir, feliz "por los futbolistas, por cómo curran. Me alegro por ellos, pero lo que un día es blanco otro es negro, así que hay que seguir".

Y todo en una jornada cuyo resultado podía haber llegado a cambiar el punto de vista de la clasificación, algo que reforzó a Villa en su idea de que "todo está tan igualado que cada partido es una final. El equipo que se rehaga en momentos de dificultad será el que crezca". "No hay un Elche o un Valladolid como otros años, pero es muy difícil", añadió, "así que hay que seguir trabajando y ser positivos tras una victoria que refuerza la idea de los futbolistas".

Villa tuvo "sólo palabras de agradecimiento" para Xisco, "porque está al 50 o al 60%, pero su presencia es importante en el equipo". "Sólo quiere ayudar y no es fácil para un jugador como él jugar así, con todas las ilusiones que se tienen en él", incidió, consciente de que "la gente lo espera todo de él y está bien que el público piense de un jugador que puede dar más, pero es injusto que todo lo bueno o lo malo que pase sea por Xisco. Aporta lo que puede, pero aquí todo depende de todos".

Y así acabó Villa una rueda de prensa "que doy por respeto a vuestro trabajo, pero mis momentos más felices del día son con mis jugadores. Ésa es mi profesión. Si por mí fuera al acabar el partido me iba a mi casa, porque mi mundo es el fútbol, el césped y mis botas".