Tras la clara derrota encajada ante el Sevilla estaba por ver quien tenía la papeleta de dar la cara al final del encuentro. El club optó por que comparecieran Edimar y Heldon, dos recién llegados al CCF que entienden el castellano pero a los que les cuesta expresarse todavía con él. Quizás era la mejor forma de evitar alguna salida de tono en un día delicado en el que el ambiente en la caseta no debía ser ni mucho menos el mejor.

Así, Edimar señaló que sabían "que sería un partido muy difícil porque el Sevilla ha entrado muy fuerte. Después de los 15 minutos iniciales estuvimos mejor pero el primer gol fue muy duro para nosotros", explicó el lateral, que apeló a "levantar la cabeza y trabajar" para poner remedio a los males del equipo. El brasileño reconoció que tanto él como sus compañeros estaban "muy tristes" y definió el resultado como "un regalo de nosotros, de todos". En esa misma línea crítica, reconoció que el equipo tiene que "mejorar" y abogó por recuperar la "solidez defensiva, porque tenemos ahora un partido difícil en casa y tenemos mucho por mejorar".

Pese a todo, Edimar aseguró que aún nada está perdido: "Tenemos confianza en nuestro equipo, pero que tenemos que correr, luchar, para que las cosas salgan como deseamos".

En la misma línea se expresó Heldon, que repitió el mensaje, algo vacío, de "levantar la cabeza y continuar trabajando". El caboverdiano explicó que "fue un duro golpe el primer gol; estábamos haciendo las cosas bien y después del gol fue muy difícil". Sobre la preocupante situación del equipo, Heldon apuntó que "cuatro derrotas seguidas es algo muy duro", por lo apeló a "trabajar mucho" porque "nos han hecho muchos goles a balón parado y tenemos que mejorar".