El runrún ("Paco, vete ya") surgió en El Arcángel el pasado domingo. Lo que iba camino de convertirse en una fiesta completa derivó en una nueva decepción para la afición del Córdoba, ya que el Sporting acabó nivelando el 2-0 registrado al descanso a pesar de jugar con un hombre menos desde el minuto 19. Por sexta vez en lo que llevamos de campeonato, el conjunto blanquiverde fue incapaz de proteger un marcador favorable en los últimos minutos. La contrariedad fue tal que algunos aficionados expresaron su descontento con la labor de Paco Jémez, ahora centro de las críticas tras amainar la polémica arbitral. Después de ocho jornadas sin ganar, el nerviosismo hace mella. Sin embargo, los futbolistas que comparecieron ayer en rueda de prensa se encargaron de ensalzar a su jefe, la gran apuesta del director deportivo, Emilio Vega.

David Valle considera que "es normal que la gente esté enfadada, más que por los partidos, por la forma en que se están produciendo los resultados. El equipo suma, pero de una manera que sabe a poco, porque son partidos que vas ganando. La reacción es normal, pero a nosotros no nos afecta para nada. Estamos unidos, tanto la plantilla como con el míster. Que la afición esté desesperada y pida unas medidas que no son las acertadas es normal".

El portero catalán es uno de los pesos pesados del vestuario. De hecho, integra el cuarteto de capitanes junto con Pierini, Javi Moreno y Dani. Llegó al Córdoba en el mercado invernal de la temporada 05-06, con el equipo angustiado en Segunda B, y por eso es un portavoz autorizado. La grada expresó su malestar. "¿Por qué? ¿Porque se nos puede complicar el descenso? Si te paras a mirar los números, que son muy fríos y no entienden de trayectorias, ha pasado una semana y le hemos sacado un punto más al de abajo -el Albacete, el Racing de Ferrol y Las Palmas llevan seis puntos menos y el Xerez, siete-. No hay que conformarse con la situación en la que estamos, pero no hay que ser drásticos", enfatizó Valle, disgustado porque "es una parte de la afición, pero no entiendo que ni siquiera esa parte piense ya en derrotismos. La trayectoria no es la que nos gustaría, pero tampoco es tan mala como para pensar ya que vamos a volver a jugar con el Cartagena y el Écija".

En opinión de Arteaga, emitir juicios con el único aval del resultado no es del todo conveniente. El interior izquierdo apuntó que "la grada habla porque paga, pero cuando íbamos ganando 2-0 al Sporting, que venía tercero y en puesto de ascenso, todo el mundo estaría contentísimo con el técnico y los jugadores". Sobre la reacción del público precisó que "se entiende, porque vuelven los fantasmas y es algo que no entendemos ni nosotros. Pero alguno de los que hicieron esos gestos y esos gritos, cuando llegó a su casa reflexionó y vio que el entrenador no tiene culpa de eso".

El fútbol a veces es caprichoso, pues "tuve una ocasión que no entró, con la que pudimos hacer el 3-2 a los dos o tres minutos del empate, y todo habría vuelto a la normalidad y no se hablaría de nada de esto". "Me lamenté de esa ocasión y de la primera parte, y otros compañeros también tuvieron ocasiones; si eres un profesional esas cosas las piensas y te duelen", subrayó.

Katxorro se adhirió al discurso de sus compañeros. El vasco, titular ante el Sporting después de su suplencia en Los Pajaritos, defendió a Paco al señalar que "cada uno puede decir lo que quiera y está en su derecho. Pero está claro que el míster está trabajando bien y nosotros estamos contentos con él, y a partir de ahí creo que entre todos podemos sacar esto adelante. Ahora enfocar la culpa hacia una persona no es justo, ni para él, ni para nadie".