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La gimnasta cordobesa Lourdes Mohedano partió ayer junto al resto de la selección española de gimnasia rítmica hacia Sofía, donde España afronta este fin de semana una nueva prueba de la Copa del Mundo, esta vez como si fuera una "revancha" del Europeo dado la alta inscripción de equipos.
Mohedano indicó a Efe que van "demasiados" equipos, ya que son 22 las selecciones inscritas, una cifra poco habitual en las Copas del Mundo.
La cordobesa señaló que las principales rivales serán Bulgaria, Rusia, Azerbaiyán e Italia, que fueron sus adversarios en los Europeos de Bakú disputados a mediados de junio.
"Vamos con ganas, aunque en los veranos se hace más duro entrenar. Sólo tuvimos una semanita de vacaciones", dijo Mohedano, para quien la principal novedad del combinado español es la baja de Artemi Gavezou.
Mohedano formará el equipo junto a Alejandra Quereda, Sandra Aguilar y Elena López, a las que se unen dos novedades, ya que la toledana Marina Viejo sustituirá a Artemi en el ejercicio de cintas y pelotas, mientras que la catalana de origen ruso Adelina Fominykh actuará en las mazas en lugar de la lesionada Artemi.
Para la cordobesa, será "todo un reto superarse", para así "demostrar que hay relevo" en el equipo nacional, en una prueba en la que se buscarán "las medallas pero sobre todo es preparatorio para el Mundial" de Izmir (Turquía) que se celebrará a finales de septiembre. También, explicó que con las dos nuevas integrantes del equipo llevan tres semanas entrenando y "se han adaptado bien", por lo que "todas confían en ellas claramente".
Tras la prueba de Sofía, el equipo regresará a España el lunes para el miércoles emprender viaje a Brasil, donde afrontarán el torneo Internacional de Vitoria entre el 16 y 17 de agosto, para continuar con una "cargadísima" agenda, añadió Mohedano, ya que a principios de septiembre volverán a afrontar otra prueba de la Copa del Mundo en Kazan (Rusia).
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