El Milar Córdoba sufrió un duro revés en su pista ante el Mariscos Antón Cortegada. El conjunto orensano se llevó la victoria por 28 puntos de Córdoba (42-70), merced al desacierto ofensivo de las chicas dirigidas por Antonio Quintero, que no encontraron nunca el camino para hacer daño a un rival con más solvencia ofensiva y con una defensa asfixiante.

Pese a que el partido arrancó con mucha igualdad entre ambos equipos, pronto aparecieron los problemas en ataque del Milar Córdoba, ante un rival que pronto puso el marcador a su favor y que supo jugar bien con esas ventajas. El 11-16 al término del primer cuarto dejaba claro que el triunfo iba a costar muy caro, pero el segundo cuarto fue determinante para la resolución del choque. Un 9-20 de parcial, con malos ataques y muy poco acierto en el aro rival, llevaron al equipo cordobés a una desventaja ya complicada de levantar al descanso (20-36).

Solo Licskai y Traoré encontraron la forma de hacer daño al conjunto gallego, que lejos de relajarse volvió a secar en defensa a las cordobesas, hasta dejarlas en solo seis puntos en el tercer periodo, que acabó con un parcial de 6-17 y un marcador global de 26-53.

Con el duelo ya totalmente decantado, el último cuarto no fue más que la oportunidad del conjunto local de maquillar su derrota, aunque el Mariscos Antón Cortegada se mantuvo firme para anotarse también ese último parcial y dejar su victoria en un 42-70 muy contundente.