José tiene a 14 jugadores sanos para recibir al Celta
Ito, Rubén y Aurelio son bajas; Gaspar y Endika están casi descartados, y hasta cinco son dudas
Once jugadores de campo y tres porteros. Así está la plantilla del Córdoba a día de hoy, tras lo visto en el primer entrenamiento semanal. La plaga de lesiones que afecta al equipo sigue acumulando huéspedes en la enfermería, aunque bien es cierto que sólo los sancionados Ito y Rubén, y el lesionado Aurelio están descartados para recibir al Celta. Por eso, y como ya ocurriera en semanas precedentes, José González decidió suspender el entrenamiento vespertino para no acumular más sustos. Y es que, en el mejor de los casos, el técnico tendría disponibles a sólo 17 jugadores para recibir al Celta, lo que le obligaría a tirar de algún canterano. El mejor posicionado es Villarejo que, al margen de ser lateral zurdo -Rubén, el único específico del puesto, es baja-, ya trabaja con la primera plantilla.
Gaspar y Endika también tienen complicada su participación ante el conjunto olívico, aunque todo dependerá de cómo evolucionen de sus dolencias. De momento, en la primera sesión con vistas a la próxima jornada trabajaron al margen de sus compañeros.
El cordobés saltó al campo, después de dos semanas fuera por el esguince de rodilla que se produjo en Éibar. "No voy a ser yo quien diga fechas de un lesionado, pero a día de hoy es más que dudoso", recalca José. Por su parte, Endika sigue recuperándose de la sobrecarga en el gemelo que se produjo la pasada semana y que frenó en seco su reingreso al grupo. En ambos casos, el técnico es pesimista.
Sí parecen que llegarán a la cita el resto de tocados. Katxorro, que en la sesión del domingo notó una sobrecarga en los isquiotibiales, también saltó al campo, aunque se ejercitó con el resto de lesionados. Pierini, Javi Flores y Yordi, con golpes de la cita en El Alcoraz, se quedaron en el gimnasio junto a Rubén -al margen de estar sancionado, tiene una elongación en el bíceps femoral- y Guzmán, que tuvo que retirarse del entrenamiento al notar unas molestias musculares.
"Habrá que ver cómo evolucionan, pero no vamos a entrenar porque tenemos riesgo de que caiga alguno más. Han hecho el trabajo físico 12 jugadores nada más y tenemos que tener precaución para poder afrontar los últimos entrenamientos con más garantías", lamenta José, que a pesar de todo no se arrepiente de haber dejado una plantilla tan corta.
"El problema puede venir porque lo de Aurelio se ha dilatado un poco más de lo que esperábamos. Si Aurelio hubiera estado recuperado hace quince días, no habríamos estado hablando de esto. Lo que pudo ser y no fue... no sirve de nada lamentarse. Hay que ser realistas, y si tengo once jugadores para jugar, vamos a competir. Ésa es la mentalidad que tenemos que transmitir", sentenció el gaditano.
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