"Esperamos una respuesta"

Al borde de las nueve de la noche del domingo, el Córdoba certificó la permanencia matemática con su 2-0 a las Palmas. 70 horas después, esta tarde, la plantilla retomará el trabajo con vistas al último partido de la temporada, que tendrá lugar el sábado (18:00) en Montilivi. El equipo, actualmente decimoquinto con sus 52 puntos, puede acabar entre la decimotercera y la decimoséptima posición en función de los resultados de la jornada 42 de la Liga Adelante. Si gana al Girona, un puesto por encima con 54 puntos, repetirá los 55 de la campaña pasada, aunque entonces terminó décimo.

Los futbolistas han desconectado en los casi tres días de descanso decretados por Lucas Alcaraz, que tiene pendiente una reunión con el dueño del club, José Romero, para estudiar su posible renovación una vez conseguido el objetivo de la salvación. Entre los jugadores con contrato en vigor (un año más) se encuentra Charles Dias, que ayer, mientras la cúpula de la entidad recibía a los administradores concursales, pasó por las oficinas de El Arcángel -también lo hizo Alberto García, quien recibió la "enhorabuena" al cruzarse con Salinas, así como varios integrantes del filial-. "Sinceramente, esperamos una respuesta ahora. Hemos conseguido la permanencia, que es el objetivo principal, aunque nos queda un partido, y por otro lado también queremos disfrutar", comentó el delantero brasileño a la conclusión del duelo con Las Palmas.

El pichichi blanquiverde ansía participar en Gerona para incrementar su cuenta de 15 goles, aunque corre el riesgo de ver una amarilla que le haga cumplir ciclo y por tanto perderse el inicio de la Liga 11-12. A su juicio, el Córdoba "ha dado la cara" y se ha salvado "por méritos propios", ya que "en los momentos clave hemos estado ahí". Ante la Unión, por cierto con su ex compañero Íñigo Díaz de Cerio en la grada -así como José Callejón, el hermano gemelo de Juanmi, que acaba de fichar por el Real Madrid-, supieron "jugar el partido. Con un poquito de presión, claro, porque nosotros nos estábamos jugando mucho y ellos estaban disfrutando. Lo bueno es que el objetivo está cumplido y ahora queda un partido para seguir sumando".

El de Belem estima que el domingo la afición apoyó "desde el primer minuto hasta el final, y yo se lo quiero agradecer. Personalmente desde que llegué aquí me han tratado muy bien, y no sólo ellos, sino hasta los utilleros y la gente que trabaja en el club. Tenemos muy buena gente trabajando aquí y este objetivo es para ellos también. Sólo espero que en el otro año que tengo de contrato no suframos tanto".