El delantero Julio Pineda y el central Antonio González fueron presentados ayer como nuevos refuerzos del Lucena en el lugar escogido en la presente pretemporada para realizar estos actos, el Hotel MS Santo Domingo.

Ambos llegan de la mano, sin hacer demasiado ruido, pero con el convencimiento de que serán pieza clave en el esquema del preparador Antonio Montero Nene. Tras su paso por el Córdoba, los ex jugadores blanquiverdes aportarán la experiencia y veteranía que acumulan durante muchos años de carrera deportiva. Tanto Pineda como Antonio representan la personalización del proyecto de Rafael Rojas, director general y deportivo del Lucena. El mandatario aracelitano destacó que desde su desembarco hace algo más de tres semanas su prioridad "ha sido traer a estos dos jugadores".

No podía ser de otro modo. Como si se tratase de una imitación de su periplo en el mundo del fútbol, el acto de presentación fue conjunto, un hecho, por otro lado, muy empleado últimamente por la entidad lucentina.

Julio Pineda fue contundente en su intervención, al aseverar que "vengo a Lucena a darlo todo", al tiempo que se desquitó la presión apuntando que "no soy un fichaje mediático, vengo a trabajar como uno más y a aportar todo lo que pueda".

Con respecto a su salida del Córdoba, el ariete señaló que "me fui bastante decepcionado", porque "yo esperaba que me hubieran ofrecido continuar" y apostilló que "en todo caso, salgo con la cabeza muy alta, ya que estoy convencido de que he ofrecido mucho al Córdoba, tanto en el terreno de juego, como en el vestuario".

Con la mente puesta en su nueva etapa como jugador provenzal, Pineda afirmó que "este año el grupo IV es muy duro", por lo que una de las claves en las que se debe fundamentar el éxito del presente curso es "la comunión entre todos los miembros de la plantilla", ya que ésta "será decisiva para lograr los objetivos que nos marquemos".

Otro de los pilares para conseguir los retos que se presenten a lo largo de la temporada, según el camero, es el de "adaptarnos pronto a nuestro feudo y convertirlo en un fortín". Lo primero será tomar contacto con el césped artificial de la Ciudad Deportiva.

Por su parte, Antonio es consciente de que la llegada de ambos al club "tiene mucha repercusión", pues "venimos del Córdoba y somos muy conocidos".

Es indudable que su relación con Rafael Rojas ha sido clave para que se materialice su incorporación al plantel comandado por Montero. Así lo aseguró durante su presentación el propio zaguero, quien alegó "motivos personales" para concretar su fichaje. Unido a ello está el hecho de que Pineda le haya acompañado en la nueva aventura. "El hecho que de Julio también haya venido ha influido mucho, puesto que llevamos muchos años juntos y nuestros hijos se han criado juntos", indicó.

El central se ha decantado por la oferta lucentina, puesto que, según dijo, "soy una persona que valoro la calidad de vida y muchos factores referentes a las condiciones de vida". El sevillano manifestó que "hay un proyecto serio" y concluyó diciendo que "Antonio Montero y Rafael Rojas me trasladan seguridad".

La apuesta del club ya se ha materializado. Ahora sólo resta que ambos futbolistas demuestren el porqué de su incorporación y la persistencia de Rojas porque vistan la que, con seguridad, será la última elástica que defiendan.