FÚTBOL SALA | SEGUNDA FEMENINA

El Deportivo Córdoba dice adiós al sueño del ascenso tras caer ante La Algaida (2-4)

  • Las de Juanma Cubero sufrieron una remontada en la primera parte a la que no consiguieron responder pese a los múltiples intentos

Rocío Gracia, abatida mientras las jugadoras de La Algaida celebran de fondo su victoria.

Rocío Gracia, abatida mientras las jugadoras de La Algaida celebran de fondo su victoria. / Juan Ayala

Al Deportivo Córdoba le toca despedirse del sueño de competir la próxima temporada en Primera División. Una final trágico en Vista Alegre ante La Algaida que, pese a que no fue superior en el partido, supo mantener la ventaja que obtuvo al darle la vuelta al marcador fugazmente en la primera parte. Tras quedar líderes de grupo después de vencer por goleada a El Ejido (8-4), las de Cubero llegaban como favoritas para superar a su rival en este play off ,pero la máxima categoría deberá esperar, al menos un año más.

El choque comenzó con el primer acercamiento por parte de las murcianas. Pero, al momento, las de Juanma Cubero respondieron con varias llegadas peligrosas. No iba a ser un partido fácil y ambos equipos lo sabían, por lo que la intensidad desde el minuto uno fue máxima. De portería a portería, las llegadas se sucedieron y Ceci Moreno sacó a relucir sus grandes habilidades como portera ante la insistencia inicial de La Algaida.

A los cinco minutos, una fantástica individualidad de Tere Muñoz a punto estuvo de sumar el primero. Esas ganas fueron las que permitieron que la jugadora, un minuto después, con un sutil toque por abajo, consiguiera batir a la meta visitante y anotar el primer tanto. Abrieron el marcador y sobre el parqué del pabellón cordobés las combinaciones y el buen juego continuaron, con dominio de las locales.

Eso sí, Ceci Moreno siguió salvando ocasiones y las murcianas estrellaron el esférico en el travesaño por partida doble. Era evidente que las de Morcillo se estaban aproximando al gol del empate, que no tardaría en llegar. En el ecuador de la primera mitad, una organizada jugada de las visitantes acabó con el balón muerto en el área cordobesa y Julia Sao fue la más rápida en anticiparse y ponerlo al fondo de la red. Pero lo peor para las locales pasaría justo un minuto después, cuando el genial movimiento de María Valverde la dejó en una posición perfecta para, con un disparo calculado, firmara la remontada para las murcianas.

Tere Muñoz pugna por el balón con una jugadora de La Algaida. Tere Muñoz pugna por el balón con una jugadora de La Algaida.

Tere Muñoz pugna por el balón con una jugadora de La Algaida. / Juan Ayala

Le habían dado la vuelta al marcador en cuestión de segundos, el palo para el Deportivo Córdoba resultó demoledor pese a los múltiples intentos por contrarrestar la ventaja. Celi Calderón la tuvo y luego Rocío Gracia lo intentaba de lejos. La insistencia e intensidad eran máximas mientras la grada de Vista Alegre animaba a las suyas. Sin embargo, ni el posterior disparo de África, que rozó el palo, ni la potencia de Celi Calderón fueron suficientes para superar a la guardameta Sonia Palencia, ni a la encerrada zaga murciana en una primer mitad en la que merecieron más.

No hubo espacio para la heroica

Con la portera visitante atajando dio comienzo la segunda parte. Eso sí, las de Morcillo ahora ejercían una asfixiante presión que complicó la vida a las cordobesas durante varios minutos, aunque Sonia Palencia seguía desesperando a las cordobesas. Y es que, el Deportivo Córdoba lo intentaba, pero lo importante, que era el marcador, no se movía. Por eso Cubero cambió de estrategia y las suyas pasaron a buscar el daño al contragolpe.

La velocidad por los costados generaba peligro, pero resultaba insuficiente. La guardameta blanquiverde le ganó el duelo a una Julia Sao que se plantó sola ante ella. Sin embargo, entre constantes idas y venidas y solo faltando cinco minutos para el final, un contraataque de libro de La Algaida permitió que Patricia Ortega sirviera un pase de la muerte a Julia Sao, que solo tuvo que empujar a portería. 

Fue un palo muy duro, con un resultado que parecía inalcanzable, pero el Deportivo Córdoba no iba a bajar los brazos. Jugando con portero-jugador, Sonia Palencia se convirtió en una máquina de atajar balones. Aunque no pudo evitar que Inma Sojo, faltando dos minutos para el final, convirtiera el doble penalti por las cinco faltas del equipo visitante.

Agonía era lo que sentía todo el pabellón. Los segundos se agotaban y la esperanza fue lo último que perdieron las cordobesas que, pese a los intentos, tuvieron que ver como en la última jugada del partido Cris marcaba el cuarto a la contra y el encuentro finalizaba.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios