Cristian Herrera evoluciona bien y Alcalá da el susto

Tras la jornada de descanso del lunes y la liviana sesión de un día antes, la plantilla del Girona empezó ayer a preparar la visita de mañana a Córdoba. Y lo hizo con una noticia buena y otra mala, como diría el chiste. La primera es que Cristian Herrera apunta a estar en El Arcángel; la segunda es que la presencia de Alcalá se tiñe de dudosa por unas molestias que lo tienen entre algodones. Felipe Sanchón y Jairo, que fueron baja ya en la jornada final ante la Ponferradina, tienen remotas opciones de participar en el partido.

Cristian Herrera sufrió el sábado en El Toralín un esguince en la clavícula al montarse sobre él el excordobesista Borja García para celebrar el 0-1 que otorgaba al Girona la clasificación para el play off. Las pruebas han determinado que el delantero no sufre dolencia alguna, al tiempo que su evolución es positiva, por lo que puede llegar a Córdoba y jugar siempre que así lo estime Pablo Machín.

Un técnico cuya mayor preocupación ahora mismo señala directamente a Alcalá. El zaguero, que ya se quedó en el banquillo en el epílogo de la temporada regular, continúa con sus molestias musculares, lo que ayer le llevó a ejercitarse al margen del grupo por precaución. Y es que su presencia en El Arcángel se antoja vital para la escuadra rojiblanca ante la ausencia segura de Lejeune, sancionado por acumulación de tarjetas, y que deja la retaguardia con apenas tres efectivos: el propio Alcalá, y los exblanquiverdes Richy y Kiko Olivas.