El Benidorm superó con claridad y merecimiento al Ángel Ximénez en el partido de Liga Asobal disputado en el Pabellón Alcalde Miguel Salas, un duelo en el que los alicantinos dominaron de principio a fin, aprovechándose tanto de las facilidades que dio el equipo pontanés en defensa como de sus imprecisiones en ataque.

La primera parte arrancó con buenas defensas y ataques elaborados y pacientes por parte de los dos equipos, una igualdad que se tradujo en el marcador, con escasa efectividad, aunque fueron los alicantinos los que pronto comenzaron a cobrar ventaja en el luminoso con los tantos de Roca y De Angelis. Reaccionaron los locales con un gran gol de Boskos y otro de Sousa para empatar (4-4), pero el Ximénez sufría a nivel defensivo, lo que propició que los visitantes, bien dirigidos por Nacho Valles, cogieran de nuevo ventajas entre uno y dos tantos favorables.

El extremo Ramiro Martínez puso el 6-9 pasado el ecuador del primer acto, un margen que comenzó a inquietar a los locales, bastante inoperantes en ataque. Paco Bustos se vio obligado a parar el choque con 6-10 en contra para tratar de cambiar la dinámica, pero el equipo pontanés se mostraba precipitado e impreciso, mientras que su adversario hacia justo lo contrario, destacando la aportación del lateral Leo Alonso.

Un siete metros transformado por Valles estableció el 7-13, aunque un parcial de 3-0, liderado por Ribeiro, despertó a los pontanenses en el tramo final. Carballeira pidió tiempo muerto, pero Aizen y Arsenashvili acercaron al Ximénez a uno (12-13), en unos últimos instantes de vértigo donde el Benidorm volvió a sacar petróleo, rentabilizando a la perfección la falta de acierto local, para estirar de nuevo su ventaja y cerrar la primera mitad con un tanto de Valles que fijaba el 13-17.

Tras el descanso, tocaba remar a contracorriente para el Ángel Ximénez, pero Roca y Djurovic devolvieron los seis de ventaja para los alicantinos a las primeras de cambio (13-19), dibujando un escenario bastante complicado para los de Puente Genil, que seguían mostrándose muy imprecisos en el plano ofensivo. Luisfe y Jung redujeron la brecha, pero Benidorm, en el intercambio de goles, conservaba los cuatro de renta, con Valles comodísimo en la dirección del juego y Martínez y De Angelis infalibles desde los extremos aprovechando la exclusión de Jung.

Los tantos de David Roca elevaron la ventaja hasta un descorazonador 18-25 que reflejaba la impotencia de un cuadro local al que no le salía nada, descosido en defensa y muy errático en ataque. Con 21-28, de nuevo Bustos paró el partido con un cuarto de hora por jugar, ordenando defensa 5:1 pero no era el día, ya que Benidorm penalizaba y castigaba todos y cada uno de los errores locales con plena eficacia de cara a portería, llegando a poner un rotundo 22-30.

En el tramo final, la defensa local trató de recomponerse, pero ya era demasiado tarde para inquietar a un Benidorm que únicamente tuvo que poner oficio para conservar su renta y llevarse los dos puntos del Miguel Salas, rompiendo así la buena racha de los de Puente Genil en su pabellón.