El Ángel Ximénez no pudo con un Bidasoa Irún que fue netamente superior en un encuentro que dominó en todo momento. Los locales se deshicieron con mayor facilidad de la prevista de un cuadro pontano que llegó a Artaleku como quinto clasificado y que comprobó en primera persona la fiabilidad del equipo guipuzcoano esta temporada, todavía invicto, segundo clasificado y con un juego que no parece haber tocado techo.

Tras vencer con claridad al Puerto Sagunto, los de Paco Bustos tenían un duro reto por delante ante el Bidasoa. Sin nada que perder, los pontanenses buscaban dar la sorpresa ante un cuadro irundarra que rayó a un excelente nivel. El siete vasco dominó desde el inicio del choque, sus extremos estaban inspirados en ataque y el tunecino Harbaoui en portería (55% de efectividad en paradas en la primera mitad), lo que favoreció las contras que le dieron grandes beneficios a los locales.

Un contraataque de Dariel García puso precisamente los guarismos en luz roja para los de Puente Genil (9-4) cuando apenas se habían disputado 15 minutos. Sin claridad de juego, Paco Bustos acumuló un disgusto enorme y llamó al orden a sus jugadores con un tiempo muerto que, o conseguía alguna virtualidad o podría ser la antesala del desastre pontano de forma anticipada.

El efecto no fue el deseado. De hecho, ocurrió lo segundo porque los bidasotarras, ahora liderados por el joven Julen Mujika, siguieron haciendo estragos desde el lateral zurdo. El dominio local era total y la renta se fue incrementando en Artaleku porque Harbaoui puso también un muro en su portería. De hecho, el encuentro quedó virtualmente encarrilado al descanso gracias a los diez goles de diferencia adquiridos por los guipuzcoanos.

Quedaba toda la segunda parte por jugar. La misión era prácticamente imposible para el Ángel Ximénez. Solo el Bidasoa, si bajase un poco los brazos y Harbaoui desapareciese de la portería, podía dar vida a los de Paco Bustos. Sin embargo, no se dio esa conjunción y el encuentro siguió claramente dominado por un bloque amarillo del que tiraba ahora Tito Díaz y Gorka Nieto.

La relajación lógica con las amplias diferencias amasadas por los vascos que cabría esperar no existió porque los jóvenes talentos del Bidasoa tenían ganas de agradar y al final el choque estuvo a punto de irse a los 20 goles de diferencia. Los de Puente Genil no estuvieron cómodos en Artaleku ante un rival que se dio un festín en su casa. 

Con un escandaloso 37-19 acabó el pleito a favor de un Bidasoa que mantiene un gran dinámica en este arranque liguero en la Liga Asobal. Por su parte, los pontanos, que siguen sin ganar lejos del Alcalde Miguel Salas, ya ponen el foco en el compromiso del próximo domingo ante el líder, el Barça. Otro hueso duro de roer para los de Paco Bustos.