CARLOS MARÍN. Solvente. En la primera parte se vio más amenazada su portería por el ímpetu del Mérida, pero resolvió bien su trabajo. Vivió una segunda parte muy plácida, ya con los locales de capa caída por el esfuerzo del primer tiempo.

JOSÉ RUIZ. Lanzado. Valiente a la hora de irse al ataque, pese a que por su banda el Mérida insistió una y otra vez para buscarle las espaldas. Sacó buenos centros y fue un incordio para el rival, sobre todo en el segundo tiempo.

JOSÉ CRUZ. Sobrio. El más entonado de la zaga blanquiverde, poderoso en el juego aéreo aunque sufrió para contener a Lolo Plá cuando le buscaron las espaldas. Ya tiene el ascenso que deseaba con el equipo de su tierra.

BERNARDO. Exigido. Tuvo mucho trabajo con la insistencia del Mérida en la primera parte, que complicó la vida a toda la defensa blanquiverde. Le costó mucho la salida de balón desde atrás y Germán Crespo prescindió de él al descanso.

GUDELJ. Polivalente. Primera parte de mucho nivel actuando como lateral izquierdo, pese a no ser su mejor posición. Con concentración e intensidad suplió su menor velocidad. Acabó como central una gran actuación.

ÁLEX BERNAL. Vigilado. Pudo entrar muy poco en juego en la primera parte por la intensidad del Mérida. En la segunda se sintió más cómodo, pero Germán Crespo lo relevó a la hora de juego en busca de más frescura en la medular.

JAVI FLORES. Capitán. Ejerció de líder de los suyos en los momentos más complicados del partido, pidió el balón y trató de serenar el juego. Se merece como pocos este ascenso en el que ha sido una pieza clave.

ADRIÁN FUENTES. Incisivo. Fue el hombre que más peligro generó en la defensa del Mérida, especialmente en el tramo que disputó de la segunda parte, cuando encontró campo y metros para explotar su potencia y velocidad.

DE LAS CUEVAS. Ausente. Apenas apareció en el tramo final de la primera parte, en un par de jugadas en las que no encontró una buena solución en el pase final. Al descanso, Crespo lo retiró para buscar más mordiente en ataque.

SIMO. Luces y sombras. Demasiado intermitente en la primera parte, fruto de la presión del Mérida, que dejó que entrara poco en juego. Apareció más, y su equipo lo notó para bien, en el tramo final del duelo.

WILLY LEDESMA. Le faltó el gol. Trabajo y corazón puso el de Torremejía a raudales, pero un partido más le faltó algo de tino y tranquilidad para haberse ido de Mérida con uno o dos goles en su cuenta personal.

CASAS. Gol para el recuerdo. Hizo el gol de la victoria de su equipo en el día del ascenso. El premio merecido a una gran temporada de un delantero que ha sabido aprovechar cada minuto que ha tenido de juego.

VISUS. Airoso. Trabajo solvente y plácido para el joven central, que se encontró a un Mérida ya con poco fuelle y que atacó con más corazón que cabeza. Demostró personalidad para salir airoso de los duelos.

LUISMI. Chisposo. Minutos de calidad para el de Plasencia, que encontró espacios para jugar como más le gusta, buscando la portería rival constantemente. Sirvió un gran pase en el gol de la victoria que hizo Casas.

VIEDMA. Liberado. Jugó a placer en la segunda parte y demostró su calidad para el juego de combinación. La temporada se le ha quedado corta a un joven con mucho fútbol, pero que no ha terminado de romper como blanquiverde.

OMAR PERDOMO. Comprometido. Entró para buscar el gol en el tramo final del partido y acabó defendiendo con coraje el costado derecho cuando su equipo se adelantó. Buenos minutos del canario en el día del ascenso.