CARLOS MARÍN. Seguro. Se mostró acertado y solvente en las acciones en las que se vio forzado a participar, que no fueron muchas. Ha agarrado con fuerza la titularidad, dando seguridad a su defensa y mostrando su clase.

JOSÉ RUIZ. Rematador. Por un día, la mejor acción del lateral no fue un centro medido y sí un cabezazo girando el cuello que comprometió a Javi Montoya en el primer tiempo. 90 minutos muy completos tanto en ataque como en defensa.

JOSÉ CRUZ. Muro. No concede nada a los delanteros rivales, siempre atento a los centros laterales para imponer su poderío en esas acciones por alto. Tuvo el gol en un remate de cabeza que se le marchó alto por poco.

ALONSO. Atento. El complemento perfecto para José Cruz, siempre atento a las coberturas y rápido para anticiparse a los delanteros a la hora de recibir el balón. Sigue demostrando que es titular por méritos propios.

EKAITZ JIMÉNEZ. Lanzado. Una vez más hizo gala de su facilidad para sumarse al ataque. Se vio algo más exigido que en otras ocasiones en defensa, principalmente con las internadas de Carmelo, pero las resolvió sin demasiados apuros.

TONI ARRANZ. Le cuesta. Después de la lesión, no ha encontrado todavía el nivel de forma con el que arrancó la temporada. Los esfuerzos defensivos sostenidos aún le cuestan y con el balón se le nota menos confiado. Poco a poco debe ir recuperando su mejor versión.

JAVI FLORES. Providencial. El de Fátima está en el mejor momento de la temporada. Fue determinante en el primer gol, iniciando la jugada que culminó Adrián Fuentes, y también en el segundo, al robar el balón con el que habilitó a Luismi.

PUGA. Un puñal. Una gran primera parte del granadino, que una vez más fue decisivo para su equipo, armando la jugada del primer gol y percutiendo siempre con peligro desde su costado derecho. Una vez más acabó fundido y sustituido.

LUISMI. Omnipresente. Estuvo metido en prácticamente todas las jugadas de ataque de su equipo, creando peligro constante y entrando muy bien en segunda línea. Decantó el partido del lado blanquiverde con una gran acción personal.

SIMO. Indetectable. Primorosa primera parte del extremo hispano-marroquí, al que la defensa del Mérida no fue capaz de frenar en ningún momento. En la segunda tuvo un par de acciones para haber hecho su gol, aunque no finalizó bien.

ADRIÁN FUENTES. Certero. Acertó con la portería en la primera ocasión de la que dispuso, dando la razón a Germán Crespo, que apostó por él como nueve ante la ausencia de Willy. Un partido muy completo del madrileño.

CASAS. Cañón. El rambleño tiene el gol entre ceja y ceja y raro es el día que no lo consigue cuando cuenta con minutos para ello. Sacó un par de disparos marca de la casa y uno acabó en las redes de la portería de Javi Montoya. Un cañón.

VIEDMA. Solvente. Dio aire fresco al centro del campo cuando a Toni Arranz el físico ya le jugó una mala pasada. Se mostró inteligente a la hora de mover el balón y solvente para, sin complicarse, hacer jugar a su equipo.

OMAR PERDOMO. Cómodo. Entró con el partido ya bastante encarrilado y se sintió cómodo, partiendo desde la banda y asociándose con Adrián Fuentes y Casas. Poco a poco debe ir dando su mejor versión, que será vital para su equipo.

CHRISTIAN DELGADO. Refresco. Dio el relevo a Javi Flores en el tramo final, ya con el partido resuelto, para cortar cualquier atisbo de reacción del Mérida. Se ha ganado que Germán Crespo cuente con él con asiduidad.

TALA. Debutante. El extremeño tuvo sus minutos en el tramo final para dar descanso a Ekaitz Jiménez, en el que fue su debut con el primer equipo. Uno de esos jóvenes que están preparados para aportar alternativas desde el filial.