Tras el mercado, solo fútbol: las claves del Unionistas - Córdoba CF

El Córdoba CF encara el mes de febrero con la convicción de que le llega el momento de la reacción. Los blanquiverdes han atravesado un complicado mes de enero en el que solo han sido capaces de arañar cuatro puntos de 12, cayendo hasta la tercera posición y sembrando dudas respecto a su fiabilidad como candidato al ascenso directo cuando se acerca el momento de la verdad.

Para colmo, el agitado mercado de enero tampoco ha ayudado a que el foco estuviera centrado totalmente en los partidos, aspecto que a buen seguro ha tenido también que ver en las pobres actuaciones que el equipo ha cuajado especialmente en los dos últimos partidos, si bien la caída en las prestaciones colectivas viene arrastrándose desde mucho antes.

Ahora, una vez cerrado el mercado de fichajes y con la plantilla ya definida -a falta de la llegada definitiva de Alberto Jiménez, que completará la zaga-, Germán Crespo y sus hombres han ganado en tranquilidad para trabajar centrados única y exclusivamente en el rival de cada fin de semana. Un factor que debe ayudar a la reacción del equipo, aún a tiempo de pelear por ese primer puesto que tan buen premio reserva para el que logre hacerse con el, el salto a Segunda División sin necesidad de pasar por el play off.

La visita a Unionistas de este domingo puede ser ese punto de inflexión que busca el Córdoba CF para escenificar su reacción definitiva, aunque a los blanquiverdes les espera un equipo exigente y que ha mejorado desde el arranque de la competición, cuando cayó en el El Arcángel claramente superado. Estas son algunas de las claves del regreso del CCF a la capital salmantina:

Un rival duro en casa

Pese a encontrarse en la parte media-baja de la tabla, Unionistas de Salamanca es un equipo que compite mucho mejor en su estadio que como visitante. Los de Raúl Casañ han sumado 17 de los 26 puntos que atesoran ante su público en el Reina Sofía, feudo del que solo dos equipos han salido victoriosos, el Talavera y el Celta de Vigo B.

En su estado, el equipo charro plantea partidos de mucha intensidad, poco lucidos por lo general y a marcadores cortos. De hecho, en 11 duelos en el Reina Sofía solo se han visto diez goles de Unionistas y otros diez de sus rivales. Unos números que dejan bien a las claras que el Córdoba tendrá que ser lo más contundente posible en ambas áreas.

Recuperar el gol perdido

Y esa contundencia pasa sobre todo por recuperar la pegada en ataque. El Córdoba se mantiene como el equipo más goleador de la categoría pero en esa faceta ha empeorado sus números de manera notable. De hecho, hace más de tres partidos que los de Germán Crespo no baten la portería rival.

Ese déficit ha empujado al club a reforzarse tanto en la vanguardia como en los costados, buscando más chispa y definición en los metros finales del campo. Hombres como Marco Camus, Canario y Juan Villar, e incluso Armando Shashoua apareciendo desde atrás, deben ser importantes en el aspecto goleador para que el equipo de Germán Crespo se acerque de nuevo a sus habituales registros.

El revulsivo de los nuevos

Más allá de lo que los fichajes puedan aportar de manera individual, será importante también lo que sumen al colectivo. El Córdoba es un equipo que ha ido de más a menos claramente y en este tramo definitivo de la temporada necesitaba una vuelta de tuerca para refrescar ideas y reponer fuerzas.

La dirección deportiva confía en que ese aire fresco que traen las cinco incorporaciones -seis cuando firme el deseado central- sirva al equipo para volver a dar una imagen similar a la del comienzo de curso. Quizás aquel Córdoba arrollador, vertical y atrevido ya no aparezca más esta temporada, pero con una versión cercana también valdrá para seguir siendo uno de los candidatos al ascenso directo. Con la plantilla ya definida, los nuevos tienen que aportar ese plus que el equipo ha perdido.

El aval de los números

Después de tres partidos sin conocer la victoria, lo primero que necesita el Córdoba es recuperar la confianza perdida. Y eso llegará con un triunfo, que visto lo visto parece más sencillo buscar en este tramo de la temporada lejos de El Arcángel. El conjunto blanquiverde ha empeorado sus números como local fruto de sus últimos tres tropiezos, pero como visitante sigue destacando.

De hecho, los blanquiverdes son el equipo que más rendimiento saca de cada uno de sus partidos fuera. En diez salidas solo ha cedido una derrota y cuatro empates. Números para que el Córdoba se dé valor y para cimentar sobre ellos ese rearme de la moral tan importante para volver a ser un equipo reconocible.