Córdoba CF - CD Ebro | Uno por uno

Las notas de los jugadores del Córdoba CF ante el CD Ebro

Once inicial del Córdoba CF ante el CD Ebro.

Once inicial del Córdoba CF ante el CD Ebro. / Juan Ayala

El Córdoba CF superó al CD Ebro en la semifinal de la Copa RFEF (1-0) y se ganó el pase a la final del torneo copero, que se disputará en El Arcángel.

Así jugaron los blanquiverdes, uno por uno, ante los maños:

CARLOS MARÍN. Seguro. Tuvo que intervenir poco y lo hizo con acierto, pese a alguna dificultad a la hora de jugar el balón con los pies. En su segundo partido como blanquiverde se ganó la oportunidad de disfrutar de esa bonita final en dos semanas.

JOSÉ RUIZ. Profundo. El lateral no se cansó de subir la banda derecha en todo el partido, sin descuidar en exceso las obligaciones defensivas. No tuvo la precisión en los centros que sí mostró ante el Montijo, pero hizo un buen trabajo.

JOSÉ CRUZ. Condicionado. Una tempranera tarjeta amarilla le obligó a jugar con el freno puesto en más de una disputa. Pese a ello, solventó con seguridad los apuros que planteó el rival y fue un frontón a la hora de despejar centros laterales.

BERNARDO. Firme. Salvo una entrega imprecisa en la primera parte en la salida de balón, el cordobés estuvo bien y seguro en su vuelta al equipo titular. Trabajó mucho ante el planteamiento del rival, que con dos delanteros exigía vigilancias constantes de los centrales.

EKAITZ JIMÉNEZ. En su línea. El vasco no baja el pistón, ni jugando 90 minutos de nuevo tres días después del duelo ante el Montijo. Su poderío físico es diferencial y le permite subir con despreocupación al ataque, porque siempre encuentra fuelle para recuperar rápidamente la posición defensiva.

TONI ARRANZ. Incómodo. No terminó de ofrecer su mejor versión, aunque fue de menos a más en el partido. Empezó impreciso y logró mejorar con el paso de los minutos. Tuvo una buena ocasión para haber hecho un gol al inicio de la segunda parte.

JAVI FLORES. Líder. Fue el hombre que sostuvo buena parte del juego de ataque de su equipo, aportando calma y criterio a la hora de mover el balón. Le volvió a faltar el gol, en un par de ocasiones que tuvo, para sacarse la espina que tiene esta temporada en esa faceta.

ADRIÁN FUENTES. Sin fortuna. Generó muchas ocasione fruto de su potencia aunque le faltó calma en el últmo momento para elegir la mejor opción. Se topó en un par de ocasiones con Rubén, que abortó las mejores ocasiones del madrileño.

DE LAS CUEVAS. Hábil. Sin la aparición en el área de otros días, al alicantino se le vio moverse bien entre líneas y generar mucha preocupación en la defensa del Ebro. No gozó de ocasiones claras y quizás notó el cansancio, porque no hace mucho que ha salido de una lesión.

OMAR PERDOMO. Apagado. Tenía una buena oportunidad para reivindicar un puesto en el equipo titular, pero fue de más a menos. Empezó participativo y tuvo un par de opciones, pero luego se diluyó hasta desaparecer del juego colectivo.

CASAS. Peleón. Solo le faltó el tino para haber hecho algún gol, porque lo buscó de todas las maneras y tuvo un par de opciones clarísimas. Importante en el trabajo colectivo a la hora de bajar balones y que su equipo pudiera estirarse.

PUGA. Determinante. El granadino aportó al equipo el fuelle físico que había perdido al entrar en la media hora final. Con su empuje por banda derecha volvió a meter a los suyos en el choque. Inició la jugada del gol de Luismi que decidió la eliminatoria.

WILLY LEDESMA. Intenso. Sin tener ocasiones claras para hacer gol, sí que apareció mucho en el frente de ataque, moviéndose incluso para recibir lejos del área y aportando siempre mucho sacrificio en la presión. El trabajo para él es innegociable.

LUISMI. El héroe. Definió a la perfección en la jugada que decantó el partido para su equipo. Demostró una vez más que tirado a un costado se encuentra mucho más cómodo, y es más decisivo para el Córdoba, que cuando actúa por dentro.

CHRISTIAN DELGADO. Frescura. El mediocentro entró con la misión de impedir que los rivales ganaran las disputas finales en el centro del campo y cumplió con su función, aportando energía y solvencia en los minutos finales del partido.

JULIO IGLESIAS. Tuvo el gol. El gaditano se quedó con la miel en los labios de hacer su primer gol con el primer equipo blanquiverde, pero en la jugada final no definió bien después de un buen regate. Poco a poco va entrando en el equipo.

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