Tras semanas intentando evitarlo, el Córdoba CF ha terminado por acogerse a la vía del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para afrontar con alguna garantía más la fuerte recesión económica que ha provocado la crisis del coronavirus. El conjunto blanquiverde, reticente a tomar esta medida ante la esperanza de volver pronto a la competición, alcanzó la pasada semana un acuerdo con la primera plantilla para una reducción de sus salarios, después de que la Federación dejara patente su intención de dar por finalizada la temporada regular en Segunda B y disputar un play off exprés del que los cordobesistas quedarían excluidos.

Dentro de la medida se encuentran la gran mayoría de los empleados de la institución, salvo los pertenecientes al departamento de prensa y una parte de los de administración, que serán los encargados de mantener el funcionamiento de la entidad en estos días. Con este procedimiento, el club espera ahorrarse una cuantía alrededor de los 500.000 euros.

En su comunicación oficial, el Córdoba argumenta que ha presentado "un ERTE de fuerza mayor con el objetivo de hacer frente a la situación generada por el coronavirus y garantizar todos los puestos de trabajo". "Aunque es una medida que desde la directiva de la entidad cordobesista se ha tratado de evitar, la reciente confirmación de que no se jugará el resto de la temporada regular y la incertidumbre sobre cuándo se conocerá el modelo de play off de ascenso hacen necesaria esta decisión", reconocen desde el club blanquiverde.

Según ha podido saber el Día, el acuerdo para la reducción de los salarios de los futbolistas de la primera plantilla, así como de la segunda y la dirección deportiva se fraguó la semana pasada, apenas días después de que la Federación expresara su idea de dar carpetazo al curso regular y jugar las eliminatorias de ascenso únicamente con los cuatro primeros clasificados de cada grupo.

Dentro de la medida, el Córdoba ha tratado de dañar lo menos posible al personal no deportivo, así como a las categorías inferiores y el primer equipo femenino. En esos casos, según confirmaron fuentes del propio club, la entidad complementará a los trabajadores las prestaciones recibidas por el Estado para que ningún profesional pierda poder adquisitivo.

Plan B en caso de 'play off' y ascenso

Además, en el caso de los jugadores del primer equipo, el segundo, y la dirección deportiva, el acuerdo contempla varios escenarios. Por un lado, la reducción salarial será menos si finalmente el club puede participar en el play off a Segunda División, algo que está tratando de pelear junto a otros equipos, pese a que la Federación parece cercana a decretar su primer planteamiento. Si se diera ese supuesto, y el CCF consiguiera jugar la liguilla y además ascender, el club asumiría la totalidad de los contratos de sus profesionales.

La medida ha sido acogida de buen grado por los trabajadores de la entidad, según aseguran desde el club, que quiso agradecer especialmente la comprensión de los profesionales de la primera plantilla y la dirección deportiva, pues su predisposición ha sido clave para que el resto de trabajadores no vean mermada su capacidad económica.