Después de unos días frenéticos en el mercado de fichajes, el Córdoba se ha tomado un respiro, aunque la oficialidad de algunas de las operaciones que el club tiene bastante avanzadas puede llegar en cuestión de horas. Mientras tanto, Alfonso Serrano y Jorge Rodríguez de Cózar han completado ya prácticamente un tercio del trabajo que tienen que hacer en cuanto a contrataciones, con el denominador común del perfil defensivo de los fichajes, salvo la excepción de Juanto Ortuño.

Parece claro que el nuevo Córdoba quiere armarse desde la defensa. Y lo cierto es que no hay mejor receta que esa para un equipo que sufrió horrores en la temporada pasada para defender su propia portería. El conjunto blanquiverde acabó el curso del descenso a Segunda B con una escalofriante cifra de 79 goles encajados en 42 partidos. Una media cercana a los dos tantos recibidos por encuentro, algo totalmente insostenible y que ha sido el gran lastre del equipo.

Por eso, si la renovación en la plantilla ya apunta a ser prácticamente integral, la zona defensiva del nuevo Córdoba apunta a ser la línea más remozada. De momento, cinco de los seis fichajes incorporados tienen ese perfil, con la excepción del atacante Juanto Ortuño, una buena oportunidad de mercado que el club se apresuró a cerrar ante el interés creciente de varios equipos en el goleador murciano.

Sólo Fernández seguirá respecto al año pasado en la zaga blanquiverde. Y junto a él están confirmados ya los laterales Raúl Cámara y Jesús Álvaro, que llegan para aportar experiencia en los costados, además de los centrales Víctor Ruiz y Fidel Escobar, que serán dos de los encargados de salvaguardar la meta blanquiverde.

En la portería, precisamente, se encuentra el último refuerzo llegado hasta la fecha. Un Edu Frías que, en principio, partirá como complemento a un arquero más veterano y teórico titular que aún está por llegar, según el plan inicial trazado por la dirección deportiva. Para ese perfil hay un nombre preferente, que es el de Pawel Kieszek. Tal y como publicó ayer el Día, el club blanquiverde ha hecho una importante oferta al jugador, que medita si regresar a una ciudad de la que se marchó siendo un ídolo hace menos de un año.

Junto a ellos, sigue siendo un objetivo prioritario el fichaje del mediocentro Imanol García, hombre de confianza de Enrique Martín, que podría ser blanquiverde muy pronto si alcanza un acuerdo de rescisión con Osasuna. Esa pieza en la medular es la que aún le falta a un equipo que seguirá incorporando jugadores en los próximos días, pero que ya tiene una buena base formada desde atrás.